Juan Carlos Alemán Santana, secretario general de los socialistas isleños durante una década y uno de los parlamentarios más activos en la historia de la Comunidad Autónoma Canaria, falleció en la tarde de ayer en Santa Cruz de Tenerife, a los 64 años, tras luchar contra un cáncer detectado el pasado verano. El PSOE canario pierde así a uno de sus líderes más emblemáticos, el que dirigió al partido en el cambio de siglo, entre los años 1997 y 2007, un largo periodo entre las etapas de Jerónimo Saavedra y de Juan Fernando López Aguilar.

Político educado en la transición del franquismo a la democracia, primero en el PCE y luego en el PSOE, pasó por todos los niveles orgánicos e institucionales antes de tomar las riendas del Partido Socialista, donde tuvo que actuar de pacificador en las pugnas internas de las distintas organizaciones insulares. Al mismo tiempo, le correspondió ejercer de oposición a los gobiernos nacionalistas y del PP, incluida una corta etapa de apoyo al gobierno de CC.

Brillante y premiado orador, se batió en la tribuna del Parlamento de Canarias con los principales dirigentes políticos isleños de las dos últimas décadas - Manuel Hermoso, Lorenzo Olarte, Román Rodríguez, Adán Martín, Paulino Rivero o José Manuel Soria-, pero también cultivó su amistad fuera del hemiciclo y era querido y respetado por todos sus adversarios.

Admirador del juego parlamentario, la negociación y el consenso in extremis, presumía de enfrentarse a sus rivales internos y externos a "calzón quitado". Aunque nunca escondió sus ambiciones políticas y batalló internamente en el PSOE para ser el sustituto natural de Jerónimo Saavedra, en 2007, en un momento álgido del socialismo, se apartó sin ruido de la carrera a la Presidencia del Gobierno de Canarias para dar paso a Juan Fernando López Aguilar. Meses después también le cedió el liderazgo del partido.

Alemán nació el 15 de agosto de 1952 en Las Palmas de Gran Canaria y siempre se mostró orgulloso de su procedencia de la calle Colmenares, junto al Parque San Telmo, aunque residió la mayor parte de su vida en La Laguna, la ciudad de la que se enamoró al ir a estudiar a su Universidad. Tras realizar la Primaria y el Bachillerato en el colegio Claret de la capital grancanaria, inició la carrera de Derecho en 1970, pero la dejó al cuarto año para iniciar la de Magisterio.

Tras acabar los estudios, ejerció de profesor de EGB en varias localidades tinerfeñas y se metió de lleno en la actividad política. En 1977 se casó con una maestra tinerfeña, con la que tuvo dos hijos. En 1979 abandonó el PCE y tres años más tarde fue uno de los fundadores de la Agrupación Socialista de Garachico, de donde fue concejal. En 1985 fue elegido secretario de Organización del PSOE tinerfeño y en 1988 ocupó la secretaría general del partido en la isla, que simultaneó con los cargos de concejal de La Laguna y consejero del Cabildo de Tenerife.

El 26 de octubre de 1997, en el Congreso regional, se convirtió en el nuevo líder de los socialistas canarios. En las elecciones autonómicas de 2003 encabezó la candidatura del PSOE a la Presidencia del Gobierno de Canarias. En 2007 se presentó como candidato a la Alcaldía del Ayuntamiento de La Laguna, cargo que no logró, y continuó en Parlamento como vicepresidente segundo. Desde 2011 era miembro de la Audiencia de Cuentas de Canarias.

Gran aficionado a los largos viajes, solía dedicar sus vacaciones a recorrer países europeos y americanos. En sus debates con dirigentes de CC, acostumbraba a espetarles que "el nacionalismo es una enfermedad que se cura viajando". También se interesaba por las nuevas, el cine y la música.

La información del PSOE sobre su muerte estuvo ayer envuelta en la confusión. A las 17.30 horas se anunció su fallecimiento en el Parlamento y se guardó un minuto de silencio entre lágrimas de la mayoría de los diputados. Sin embargo, el óbito oficial no se confirmó hasta las 19,15 horas.