Hernández Bento apela a "conformar otras mayorías" ante el cisma CC-PSOE

En declaraciones a los medios de comunicación al finalizar el acto conmemorativo del 38º aniversario de la Constitución Española, Hernández Bento lamentó el "momento de incertidumbre en el pacto" entre nacionalistas y socialistas "justo cuando se cierra el Gobierno de España", después de casi un año de interinidad por la incapacidad política de alcanzar mayorías parlamentarias. Antes incluso de la reelección del popular Mariano Rajoy como presidente español, gracias a la abstención del PSOE y el apoyo de CC entre otros partidos, la inestabilidad se instaló en el Ejecutivo canario tanto por la moción de censura nacionalista contra los socialistas en Granadilla de Abona como por discrepancias políticas acerca del proyecto de ley del suelo, la gestión sanitaria, la inversión en carreteras y, finalmente, el reparto de los fondos del extinto Impuesto sobre el Tráfico General de Empresas (ITE).

Justo antes de la firma de la adenda para garantizar la continuidad del pacto, el PSOE negoció presentar con el PP y otras formaciones parlamentarias una moción de censura contra CC, aunque los populares también admitieron conversaciones simultáneas con los nacionalistas. Ahora, los cálculos se repiten ante la crisis del repacto por la distribución del ITE a través del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) con el criterio de la triple paridad, aprobado en solitario por CC a causa del abandono del PSOE de la reunión del Consejo de Gobierno.

A juicio del representante del Estado en la Comunidad Autónoma, "lo importante es que los grupos políticos en el Parlamento de Canarias se pongan de acuerdo para dar estabilidad al Gobierno. No sé qué fuerzas políticas son las que tienen que llegar a esa estabilidad, pero desde luego los canarios nos merecemos un gobierno estable", subrayó Enrique Hernández Bento durante el homenaje a la Carta Magna celebrado en la capital grancanaria.

Al acto asistieron, entre otras autoridades civiles y militares, los consejeros autonómicos de Sanidad, el socialista Jesús Morera, y de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento, el independiente designado por los nacionalistas Pedro Ortega, que evidenciaron las discrepancias existentes entre los socios al finalizar la conmemoración institucional. En total y absoluta sintonía con la portavoz y consejera de Hacienda, la nacionalista Rosa Dávila, Ortega negó que la tensión de la mesa de seguimiento entre CC y PSOE por el reparto del Fdcan, alrededor de 320 millones durante este año y 2017, se experimentase en la previa reunión gubernativa: "No, todo lo contrario, fue un Consejo tranquilo, en el que además los asuntos se despacharon con normalidad y, además, con toda cordialidad, como la que hemos tenido en todos" los encuentros del órgano colegiado.

Después de insistir que la desconfianza entre los partidos "no influye en la acción de gobierno", el consejero de Economía limitó las desavanencias al Fdcan, "en el resto de los temas no hay ninguna discrepancia". Presente durante las respuestas de su compañero a los periodistas, el titular de Sanidad desmintió la "cordialidad y normalidad" de los socios en el seno del Consejo de Gobierno durante su posterior intervención.

Según Jesús Morera, "los socialistas pensamos que el reparto del Fdcan no es el adecuado, estamos en desacuerdo y se ha generado una importante contrariedad en el Gobierno". Más aún, "la situación es bastante incómoda, ciertamente, ya sobrepasa la mesa del pacto, incluso, y está en manos de los partidos", subrayó el consejero de Sanidad, objetivo de las críticas nacionalistas por la desviación presupuestaria de su departamento, antes de aclarar que la decisión sobre la ruptura formal de la alianza corresponde a las cúpulas de las dos formaciones políticas.

Además, el consejero socialista aprovechó para recordar el rechazo expresado por parlamentarios de otros partidos, como los populares, a la distribución del ITE por la triple paridad. En opinión de Jesús Morera, "el PP ha manifestado hace tiempo que no está de acuerdo cómo se ha hecho lo del Fdcan, de hecho, ellos pensaban que tenía que ser para elementos de gobierno, como sanidad, asuntos sociales y educación, que era realmente para lo que hizo esa transferencia".

Aparte del rechazo del PSOE, el PP y otros partidos a la distribución del 75% de los recursos del ITE, destinados a infraestructuras, la aplicación del criterio de la triple paridad también provocó las críticas del Cabildo y la mayoría de los ayuntamientos de Gran Canaria al considerar que la decisión beneficia a las islas periféricas en detrimento de las capitalinas, una estrategia calificada de "clientelismo político". También el reparto del 20% del Fdcan, dedicado a iniciativas contra el paro, suscitó la impugnación por parte de la Federación Canaria de Islas (Fecai), ya que el Gobierno autonómico excluyó las propuestas presentadas por los cabildos y asignó las partidas al Servicio Canario de Empleo (SCE).

Pese al desacuerdo mostrado el lunes en la mesa de seguimiento del pacto, la ruptura de la alianza entre CC y PSOE se complica ante la actual tramitación parlamentaria de los presupuestos generales de la comunidad autónoma para 2017, ya consensuados entre ambas formaciones. A la necesidad de sumar los votos nacionalistas y socialistas para la aprobación de las cuentas del próximo ejercicio, se añaden otros asuntos inminentes como el proyecto de ley del suelo y la nueva normativa turística en el Parlamento de Canarias o la reforma del Estatuto de Autonomía en las Cortes Generales.

Precisamente, la política esta-tal también influye en el pacto autonómica, ya que la minoría popular en el Congreso de los Diputados obliga al segundo gabine- te de Mariano Rajoy buscar apoyos múltiples en el arco parlamentario. Por tanto, las próxima negociaciones de PP, PSOE y CC, sin olvidar a Nueva Canarias, en la madrileña Carrera de San Jerónimo pueden reconfigurar las alianzas en la tinerfeña calle de Teobaldo Power.