La crisis desatada en el Gobierno de Canarias no pasa desapercibida para los empresarios. Este jueves, el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), Agustín Manrique de Lara, dio de plazo hasta el 31 de diciembre para que nacionalistas y socialistas pongan fin a una "inestabilidad" que, a su juicio "dura demasiado tiempo".

El presidente de la patronal de Las Palmas no ocultó el temor de la clase empresarial a que las peleas internas en el Gobierno de Canarias frenen el avance de la economía y las calificó como "muy negativas". Sobre cómo poner fin a la crisis, Manrique de Lara dejó abierta la puerta a cualquier tipo de solución, tanto que los partidos que sustentan la gbernabilidad opten por recimentar el mismo pacto para darle estabilidad, como que se articule "una nueva solución", en alusión a la conformación de nuevas mayorías parlamentarias.

El máximo responsable de la organización empresarial recordó que la agenda para la consecución de hitos relevantes para la economía de las Islas es "apretada" y puede verse lastrada por el enfrentamiento que Coalición y PSOE mantienen en el Archipiélago.