La exvicepresidenta del Gobierno de Canarias, Patricia Hernández, se sentará mañana justo enfrente de quien fuera su jefe en el Ejecutivo, Fernando Clavijo (CC). Como presidenta de su grupo parlamentario, la socialista ocupará el escaño que hasta ahora tenía el dirigente del PP, Asier Antona, que queda desplazado hasta el cuarto asiento, aunque compartirán espacio en la misma fila. Socialistas y populares se reparten las dos primeras hileras de sillones en el bando de la oposición. Tendrán delante a los miembros del Gobierno en minoría y al Grupo Nacionalista Canario (CC-PNC).

Tras más de dos horas de intenso debate, la junta de portavoces del Parlamento aprobó ayer por unanimidad una nueva distribución de escaños, tras la ruptura del acuerdo de gobernabilidad entre nacionalistas y socialistas y la destitución de los cuatro consejeros del PSOE del Gobierno el 23 de diciembre.

El PSOE y el PP compartirán espacio en el hemiciclo. Hace año y medio los grupos de la institución aprobaron una resolución que fija la ubicación de la oposición de mayor a menor y a los socialistas les toca delante de la bancada azul del Ejecutivo, al tener 15 diputados frente a los 12 del PP. El PSOE logra, por tanto, imponer en parte su criterio y ocupar los asientos donde estaban antes los populares.

Pelea por los asientos

Con este acuerdo los miembros del Gobierno y los diputados de CC-PNC estarán a la derecha de la Mesa del Parlamento, y a continuación se situarán los cinco representantes de Nueva Canarias y los tres del Grupo Mixto (Agrupación Socialista Gomera).

A la izquierda de la Mesa y frente al Ejecutivo estarán los diputados socialistas, a continuación estarán los del PP y al fondo a la izquierda los siete de Podemos.

La presidenta del Parlamento, Carolina Darias, informó en rueda de prensa del acuerdo que ha implicado "generosidad" y agradeció públicamente la predisposición de todos los portavoces para contribuir a que el consenso fuera posible "no sin dificultad". De hecho, debido a las discrepancias suscitadas los miembros de la junta se desplazaron al arco parlamentario para estudiar in situ el reparto de asientos.

La discusión entre los portavoces fue bastante tensa, especialmente entre PSOE, PP y Podemos, y el reparto alcanzado no contenta a todos, aunque al final los grupos hicieron concesiones.

Así, tras analizar la demanda inicial del PSOE y otras cuatro propuestas ofrecidas por los servicios de la Cámara se llegó a un acuerdo a regañadientes por parte de las fuerzas políticas de la oposición y no tuvo que someterse a votación, un aspecto que el portavoz de CC-PNC, José Miguel Ruano, consideró positivo al fraguar el entendimiento entre las organizaciones.

Los grupos tienen hasta las diez de la mañana de hoy para informar a la Cámara de qué diputado ocupará cada butaca. La reubicación se plasmará ya en el pleno extraordinario y monográfico de mañana, donde el presidente, Fernando Clavijo, expondrá las razones del fin de la alianza con los socialistas.

Respecto a la nueva asignación de puestos, el portavoz del PSOE, Iñaki Lavandera, señaló que la opción escogida "fue el único acuerdo posible". Mostró su satisfacción porque los tres asientos "más relevantes" los asumirán los socialistas, si bien el PSOE aspiraba a ocupar más escaños en la primera línea, donde el PP consiguió cuatro butacas. "Al final uno tiene que someterse a una mayoría porque las otras opciones eran peores y hubo que aceptar algo con lo que no estamos cómodos ni mucho menos, pero es lo que hay", admitió.

La portavoz del PP, Australia Navarro, destacó que después de "debatir profundamente se alcanzó un acuerdo unánime", mientras que su homóloga en Podemos, Noemí Santana, reconoció: "Todos salimos con un sabor agridulce porque todos perdemos". De hecho, el portavoz y la presidenta de la formación morada estaban en la primera fila de la oposición y ahora el grupo estará detrás del Gobierno en la grada curva. El PSOE queda bastante disperso y el PP ya no es el primer grupo sentado frente al Gobierno. "No sé si esto va a ser efímero y durará solo unos meses", indicó Santana, que no descarta que prospere una cuestión de confianza a Clavijo ni tampoco ve "descabellado" que salga adelante la moción de censura contra CC.