Roto el pacto regional, a la oposición en La Laguna le han entrado prisas por arrebatar el bastón de mando a José Alberto Díaz. Pese a no contar con los apoyos suficientes ni un nombre que encabece la propuesta Unidos se Puede, Por Tenerife-Nueva Canarias y los socialistas Javier Abreu y Yeray Rodríguez han lanzado una declaración que pretende ser previa a la presentación de un moción de censura pero que sirve, especialmente, para elevar la presión sobre los tres concejales del PSOE que se mantienen fieles al acuerdo que firmaron el verano de 2015. Hoy por hoy son once contra tres y mientras estos resistan -Mónica Martín, Zebenzuí González y María José Castañeda- será imposible alcanzar la mayoría absoluta que exige la ley para propiciar el cambio en la alcaldía.

Como "gesto" de invitación el texto que los censurantes presentaron ayer incluye, sin firma, los nombres de los tres ediles socialistas sobre los que recae ahora el peso de la última decisión. De hecho, el portavoz del principal partido de la oposición, Unidos se Puede, Rubens Ascanio, se dirigió directamente a ellos durante la presentación del documento: "Es necesario que den un paso. No vale decir que ahora mismo hay tiempo, que hay que reflexionar. Hay que cambiar las cosas y podemos hacerlo", les apremió.

Y es que la ruptura del pacto regional entre Coalición Canaria (CC) y el PSOE a finales del pasado mes de diciembre desestabilizó aún más la difícil situación política lagunera. La división socialista, con Abreu y Rodríguez apartados del comité local y destituidos de sus competencias, dificulta, sin embargo, la posibilidad de un cambio en el salón de plenos.

Tras el cese de Abreu como líder local de su partido, Mónica Martín fue designada como presidenta de la gestora y ha reiterado en las últimas semanas su intención de "seguir trabajando" y no "dejarse llevar por venganzas políticas" en el municipio. Está a la espera, reiteró ayer, de que su partido "concluya un proceso interno de reflexión" abierto incluso a nivel regional.

De hecho, el presidente de la gestora de los socialistas canarios, José Miguel Rodríguez Fraga, durante un encuentro del portavoz de la gestora federal Mario Jiménez con dirigentes regionales y militantes apoyó indirectamente a Martín y aseguró que "la iniciativa para que el PSOE participe en una moción de censura tiene que partir de la agrupación local". Con estas palabras, Fraga refrenda la autonomía de la gestora lagunera. "Una moción de censura no se presenta porque un señor o dos planteen esa posibilidad constantemente en los medios de comunicación", insistió.

Negativa de la gestora

"No vamos a imponer nada desde arriba", mantuvo aún cuando diputados de la Cámara regional como Gustavo Matos o Dolores Corujo les instaron a dar el visto bueno a la iniciativa planteada desde los grupos de la oposición.

Para Matos, según el símil explicó en la reunión, CC es como el abusón del patio del colegio al que si no le plantas cara el primer día te roba el bocadillo todo el curso. "Eso es lo que ha pasado, algunos que hoy se rasgan las vestiduras con CC no supieron plantarle cara desde el primer momento y por tanto nos robaron el bocadillo en Puerto de la Cruz, en Arico, en Granadilla, en La Laguna y en todos lados".

Javier Abreu, exlíder de los socialistas laguneros hasta que su partido decidió apartarlo de esas responsabilidades y el alcalde le arrebató sus delegaciones por falta de con fianza, aseguró ayer que su intención al firmar ese documento previo no era otra que reiterar lo que ya ha dicho "la dirección del PSOE en Canarias, en Tenerife y todos los cargos públicos y orgánicos: el pacto en cascada se ha roto y no hay vínculo con Coalición".

"La Laguna puede ser el inicio de la transformación para el Cabildo de Tenerife y el Gobierno de Canarias. Aquí no caben las excusas", insistió en referencia a sus compañeros de partido. "Todos sabemos que CC es una formación política de la que uno no se puede fiar, consecuentemente estamos dispuestos a firmar y participar en esta moción de censura. Los concejales que no quieran participar que lo expliquen", retó.

Respecto a quién tomará el relevo de Díaz, desde el punto de vista del portavoz de Unidos no es un problema ni un asunto que las fuerzas firmantes hayan tratado todavía. "Este documento no tiene nombre de alcalde ni alcaldesa porque, les aseguro, ese no va a ser un problema", sentenció. Las prioridades son, dijo, "programa urgente para la pobreza y un Plan General que garantice un desarrollo sostenible" del municipio.