¿Por qué abandona la carrera por presidir el PP de Canarias?
Un proceso electoral debe tener dos etapas: una en la que los candidatos presentan sus propuestas, que pueden ser divergentes, y después hay un momento en el que la responsabilidad que tenemos como dirigentes nos obliga a que exista una convergencia, una aproximación y unión. Sin embargo, en los últimos días la divergencia, la separación, empezaba a dejar ver ciertos riesgos; comenzaba a caminar por un sendero que no me parecía correcto y eso es algo a lo que yo también he contribuido.
¿A qué se refiere de manera concreta?
A las descalificaciones, a poner en duda la calidad democrática de la organización, a elevar el tono de los discursos. En definitiva, a sacar los trapos sucios a la calle, algo que a mí me parece que no es un buen camino y por eso me aparto de él. No quiero contribuir a que al final de este proceso el PP salga perjudicado, algo que ocurriría de continuar por este sendero.
Hernández Bento y Tavío han unido sus fuerzas y le invitan a sumarse. ¿Lo hará?
No. Mi decisión de apartarme significa quedarme a un lado. Con Cristina Tavío tengo una relación muy afectuosa y de absoluto respeto a su decisión, pero ha habido en los últimos días razones para no secundar esa candidatura. Plantear impugnaciones, recursos y sacar fuera del ámbito estricto de la organización el debate electoral, no me parece un buen camino y por eso no voy a apoyarlos.
¿Porque Hernández Bento está en esa candidatura?
Siempre dije que avanzar en la confluencia requería que alguien cediera en beneficio de otro y nunca planteé como una condición sine qua non ser quien encabezara ni tener un puesto de responsabilidad. Lo que no comparto es que se pretenda llevar parte del proceso electoral a los juzgados y como he visto que esa es la dinámica que, sobre todo, Enrique Hernández tiene marcada, no quiero formar parte, porque creo que eso va a perjudicar gravemente al PP.
¿Libertad de voto para los militantes que lo habían avalado?
Durante los próximos días voy a escuchar también a Asier Antona. Más allá de la discusión que hemos tenido sobre la validez de los avales, ha acreditado un apoyo mayoritario de los afiliados y, en breve, me pronunciaré sobre el candidato al que voy a apoyar, si es que apoyo a alguno. Ya he dicho que a Enrique [Hernández Bento] no lo voy a apoyar y ahora me tomaré unos días de reflexión.
La cuestión entonces es si no apoya a nadie o apoya a Antona. ¿Correcto?
En efecto.
Y adoptada su decisión, ¿sugerirá a quienes le han apoyado que tomen el mismo camino?
Quienes me han apoyado siempre han respaldado las decisiones que he ido tomando, incluida la de esta mañana [en referencia a su renuncia de ayer], pero a partir de ahora, evidentemente, cada uno tomará la postura que considere.
¿Apartarse es una decisión colegiada o individual?
Me ha influido muchísimo lo que puede pasar en Gran Canaria. Como dirigente del PP en la Isla, me preocupa el futuro. He hablado con muchos dirigentes y amigos de estos últimos 20 años y creo que mantener una candidatura desde Gran Canaria puede romper la unidad y la cohesión del partido que necesitamos de cara a los objetivos electorales de 2019.
¿Por qué está esa unidad en peligro?
En los últimos años, el PP ha sufrido en Gran Canaria una crisis importante de liderazgo. Se marcharon José Miguel Bravo [de Laguna] y José Manuel Soria, hemos retrocedido electoralmente y nuestro objetivo debe ser recuperar el respaldo electoral en ese 2019. Si mantengo a machamartillo la candidatura cuando hay dirigentes y afiliados de Gran Canaria que se han posicionado al lado de un candidato y otros de otro... Esto estaba tomando un rumbo de descalificaciones y esas cosas se sabe como empiezan pero no cómo terminan. Debo ser responsable y no seguir agrandando la brecha que puede abrirse entre dirigentes y afiliados del partido en Gran Canaria.
Bento deja paso a Tavío y el oponente de ambos es Antona. ¿Cómo valora que el principal nicho de votos del PP, Gran Canaria, pierda la presidencia?
Más allá de quién sea el presidente o de qué isla sea, lo más importante es que Gran Canaria salga reforzada en todo este proceso. Por eso le digo que mantener mi candidatura teniendo en cuenta que hay muchos dirigentes del partido que van a apoyar a Antona sería hacer un flaco favor a la unidad que necesitamos de cara al futuro. Eso lo he antepuesto por encima de todo, más que el hecho de la isla de la que sea originario el candidato. Creo que el futuro de Gran Canaria va a depender de que nos mantengamos unidos independientemente de la isla de la que sea el presidente. Si mantenemos las discrepancias, vamos a perder la cohesión necesaria para poder transmitir a los grancanarios un proyecto ilusionante.
Se retira por no echar leña al fuego. ¿Llama a quienes quedan en liza a rebajar el tono?
Absolutamente. Fundamentalmente influye en mi decisión el hecho de que nosotros como dirigentes no podemos gestionar este momento de una manera poco sensata y ya estábamos empezando a hacerlo.
¿Incluido usted?
Claro que me incluyo. Hemos estado elevando el tono y cuestionando la calidad democrática de la organización a la que pertenezco desde hace 20 años. ¿Cómo voy a cuestionar ahora los procedimientos? No me parece coherente. Por eso creo que la responsabilidad ahora pasa por rebajar la tensión, renunciar, incluso, a aspiraciones personales y propiciar que el partido salga beneficiado.
