Los comités de empresas del Servicio Canario de Empleo (SCE) rechazaron ayer las declaraciones del presidente de la Confederación de Empresarios (CCE), Agustín Manrique de Lara, en las que solicita el cierre temporal de este organismo por inoperante. Creen que este tipo de propuestas "esconden una privatización encubierta de los servicios públicos de empleo".

"Y por desgracia es un mantra del sector privado, que, aprovechando la crisis, cuestiona todo lo que proviene del sector público", critican en su comunicado, en el que apuntan que desde el SCE se trabaja para "ser más competitivos en los servicios de intermediación, sobre todo porque la reforma laboral ha abierto la entrada de agentes externos en este campo". Ven necesario más control de las funciones externalizadas por el SCE.

Los representantes sindicales defienden que los trabajadores del servicio están "altamente cualificados para llevar a cabo una buena gestión y la aplicación de las políticas activas de empleo" y tienen experiencia "más que contrastada".

Alegan que el SCE necesita más personal, ya que "históricamente no se ha contado con los efectivos laborales suficientes". Además, en los últimos años "este problema se ha agravado por el incremento de usuarios".

Estiman que la CCE debía haber expresado su opinión en el Consejo General de Empleo, donde también están presentes los sindicatos y las administraciones y entre sus competencias figuran la aprobación de criterios y líneas de actuación del SCE y su adaptación a las necesidades del mercado de trabajo. Exigen a la patronal que deje de echar "leña al fuego".