El secretario insular del PSOE de Gran Canaria y vicepresidente del Cabildo insular, Ángel Víctor Torres, es el candidato mejor colocado para disputar el liderazgo del PSOE canario a Patricia Hernández. El sector que forman los sanchistas y críticos con la dirigente tinerfeña ultiman su plancha ante la premura del calendario aprobado el pasado sábado por el Comité Regional y que fija las primarias para elegir al secretario general el próximo 23 de julio. El tercero en liza es el eurodiputado Juan Fernando López Aguilar, que ya trabaja en formar un equipo para recabar los avales necesarios que le mantengan en la pugna.
Los promotores de la candidatura mantienen contactos y reuniones para definir el perfil de los aspirantes. El debate se centra en el cabeza de lista que se disputan principalmente el dirigente grancanario y el diputado regional Gustavo Matos. Pero también se encuentran las opciones del presidente de la gestora de Tenerife, Héctor Gómez, y el de la secretaria insular de Lanzarote, Dolores Corujo. Los problemas de salud de Gómez dificultan que pueda encabezar la plancha, mientras que la alternativa de Corujo ha perdido enteros tras la derrota de Susana Díaz en las primarias federales, ya que la diputada lanzaroteña era una firme defensora de la líder andaluza.
Los dirigentes que articulan esta lista alternativa a la de Hernández tienen que limar asperezas porque, aunque el objetivo final es el mismo, existen diferencias de criterio entre los distintos dirigentes en liza. Gustavo Matos defiende que el candidato alternativo a Hernández debe ser de Tenerife, que es el principal feudo de la exvicepresidenta del Gobierno, para dividir el voto en la isla donde hay más militantes socialistas y así debilitar su candidatura.
Pero los representantes de la provincia oriental consideran que el cabeza de lista debe ser de Gran Canaria, isla donde Pedro Sánchez consiguió más votos en las primarias federales y donde la opción de Hernández es más débil. Aquí no hay duda de que el candidato es Torres porque Sebastián Franquis se ha autodescartado.
Lo que sí se busca es que sea una plancha que aglutine a varias islas teniendo en cuenta que la mayoría de los secretarios insulares no están en la onda de Patricia Hernández. La principal fuerza radica en Gran Canaria, mientras que en Tenerife se pretende recabar los votos de aquellos militantes descontentos y que votaron por el sanchismo en las primarias federales. Sin embargo, la otrora división en el socialismo grancanario se ha traslado a Tenerife ya que ahora hay varios sectores en la isla e incluso Juan Fernando López Aguilar tiene también el respaldo de algunos dirigentes tinerfeños que aún no han salido a la palestra hasta que se oficialicen las candidaturas.
Una vez que se ha marcado el calendario y empieza la cuenta atrás para las primarias, se inician la guerra de declaraciones entre unas y otras candidaturas. En este sentido, los afines a Patricia Hernández aseguran que entre sus partidarios hay tanto militantes que apoyaron a Susana Díaz en las anteriores primarias como afines de Sánchez, e incluso de Patxi López.
Dificultades
Por su parte, los críticos dicen algo similar y ponen como ejemplo a Dolores Corujo, dirigente susanista que en Canarias no respalda a Hernández, según aseguran, y que ha estado en las quinielas para pugnar por la Secretaría General desde hace varios meses.
Quien sí lo tiene claro por ahora es el exsecretario general Juan Fernando López Aguilar que, a pesar de no estar conforme con el calendario aprobado, ya se ha puesto a trabajar en buscar equipos de militantes que le respalden para buscar los 630 avales necesarios para poder ser candidato y hacer campaña.
Aunque dentro del partido los hay que ven con dificultades que López Aguilar pueda conseguir los avales, el exministro no se arredra y quiere seguir adelante con su intención de volver a liderar el partido una década después de dejar las Islas para ser diputado en el Congreso y, posteriormente, parlamentario en Estrasburgo. Ahora vuelve con la intención de fortalecer el partido en Canarias aunque todavía anida la desconfianza en algunos sectores del partido que no le perdonan el gesto que hizo hace diez años. No obstante, tanto desde la candidatura de Hernández como desde los críticos se apunta a la posibilidad de intentar convencer a López Aguilar para que se una a ellos en función de cómo transcurran los acontecimientos.
