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Amores y desamores

La historia de los pactos y rupturas entre nacionalistas y populares se inició hace 22 años con Coalición Canarias siempre en la Presidencia del Ejecutivo

La historia de los pactos y rupturas entre nacionalistas y populares empezó en 1995 y se han ido sucediendo durante las distintas legislaturas autonómicas. Ahora, tras el cisma con el PSOE el pasado diciembre, CC se ha quedado con un Gobierno en minoría, presidido por Fernando Clavijo, de tan solo 18 diputados y los tres prometidos parlamentarios de la Agrupación Socialista Gomera (ASG). Y ambos partidos vuelven a flirtear para negociar la entrada de los populares en el Ejecutivo. El PP ha apoyado en cuatro ocasiones a CC y en tres de ellas ha habido ruptura antes de finalizar la legislatura.

El romance se inició tras las elecciones de 1995. Manuel Hermoso se había convertido en presidente del Gobierno en 1993 después de que las Agrupaciones Independientes de Canarias (AIC) presentaran una moción de censura al socialista Jerónimo Saavedra, lo que supuso la creación de Coalición Canaria: 31 diputados fruto de la suma de las AIC, el Centro Canario Independiente, de Lorenzo Olarte, Iniciativa Canaria (Ican) y Asamblea Majorera.

Hermoso, líder de la Agrupación Tinerfeña de Independientes (ATI) y de las Agrupaciones Independientes de Canarias, había conseguido ser presidente del Gobierno y acabó su mandato, que intentó revalidar ya como Coalición Canaria en 1995. Obtuvo 21 diputados, y el PSOE pasó de 23 a 16 escaños, fruto del desgaste que a nivel nacional sufría Felipe González en su última legislatura derivado de los escándalos de corrupción. Mientras, el PP canario, que aprovechaba esa situación subido a la ola de José María Aznar, logró que José Miguel Bravo de Laguna obtuviera 18 escaños.

Primera alianza

Bravo de Laguna ofreció a Hermoso un año de gobierno en solitario y entrar en el Ejecutivo canario un año después, tras las Elecciones Generales de 1996, pues preveía que José María Aznar sería el próximo presidente de España, lo que facilitaría las relaciones bilaterales Estado-Canarias. Durante esos años al frente del Gobierno, Hermoso no expulsó a los consejeros del PP pero sí hubo varios cambios debido a las peleas internas de los populares.

Tras el batacazo electoral del PP en 1999, al obtener 15 diputados -tres menos que en 1995- y la caída de un 4% de apoyo en votos, Bravo de Laguna anunció su dimisión como líder del partido la misma noche del recuento electoral. Empazaba la era de José Manuel Soria al frente de la organización, que duró, nada menos, que 17 años.

José Manuel Soria reeditó el pacto con CC bajo la presidencia de Román Rodríguez, que logró 24 diputados. Los consejeros del PP eran Gabriel Mato (que después fue sustituido por Guillermo Guigou) y Tomás Van de Walle. La investigación sobre Tindaya provocó una crisis interna en el seno del PP, ya que cuatro diputados populares, entre ellos Bravo de Laguna y Van de Walle, votaron con CC en contra de las conclusiones de la comisión de investigación. El PP decidió irse del Gobierno y apoyar a Coalición desde fuera, lo que produjo un nuevo gobierno nacionalista monocolor.

En 2003, y tras las luchas internas dentro de CC, la reputación política y popular de Adán Martín, que había ostentado la Vicepresidencia y la Consejería de Economía y Hacienda con Rodríguez, garantizó que los nacionalistas obtuvieran 23 escaños.

El PP volvió a pactar con CC en la confianza de que iban a continuar gobernando en Madrid y se inició la cuarta presidencia ininterrumpida de CC. Pero en 2004 se produjo el vuelco electoral que provocó la salida de los populares de La Moncloa y la llegada de José Luis Rodríguez Zapatero y el PSOE al poder.

El PP en Canarias entró entonces en la dinámica opositora contra los socialistas, extremo que Adán Martín rechazaba y optó por echarlos del Gobierno ante el deterioro de las relaciones con el Estado. Los consejeros del PP eran Australia Navarro, Luis Soria -hermano del presidente del PP- y Águeda Montelongo. Martín los destituyó en mayo de 2005 y negoció con el PSC un apoyo parlamentario hasta culminar su legislatura.

En 2007, con Paulino Rivero como candidato, CC obtiene peores resultados: diecinueve diputados. Esta vez José Manuel Soria le ofrece sus 15 escaños a cambio de la Vicepresidencia y la Consejería de Economía y Hacienda.

Pero las tiranteces entre ambos provocaron la ruptura pocos meses antes de concluir la legislatura, cuando Soria decidió irse del Gobierno tras finalizar sus últimos presupuestos. Rivero terminó el mandato, como gran parte de sus antecesores, en minoría.

En 2011, Rivero obtiene 21 diputados al igual que el PP, y se alza con la Presidencia, esta vez, con el apoyo del PSOE, liderado por José Miguel Pérez. Consiguen acabar juntos la legislatura.

En 2015, con Fernando Clavijo, CC suma 18 diputados y tras un pacto con el PSOE los nacionalistas logran su séptima Presidencia ininterrumpida desde 1993, cuando se formó CC. Tras la ruptura con los socialistas, con Patricia Hernández como vicepresidenta, solo un año y medio después del pacto, los nacionalistas vuelven ahora a abrir negociaciones para cogestionar el Gobierno con el PP, después de que este lleve seis años en la oposición.

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