La Base Naval de Canarias y Arsenal de Las Palmas es "trascendental para garantizar la seguridad de todo el país y de las Islas, que, además, son un motor económico de nuestra nación". Así lo aseguró ayer la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, al inicio de su visita a Gran Canaria, donde también conoció las unidades del Ejército del Aire en la Base Aérea de Gando. En su primer viaje oficial, dio aliento a los efectivos de las Fuerzas Armadas en el Archipiélago y elogió su papel para velar por la seguridad en España.

Con los primeros rayos de sol y con el buque de acción marítima Relámpago como testigo, la titular de Defensa llegó a las instalaciones de la Base Naval, acompañada por el almirante jefe de Estado Mayor de la Armada, Teodoro López Calderón, el almirante comandante del Mando Naval de Canarias, Juan Luis Sobrino, y el jefe de la Base Naval y Arsenal de Las Palmas, José María Ripoll Cantero.

Un día después de visitar Fuerteventura y Tenerife, Cospedal fue recibida con honores de ordenanza y pasó revista a un centenar de integrantes de Marinería y Tropa. Acto seguido, en su discurso destacó que España tiene una situación especial en el contexto geopolítico internacional, con una posición geoestratégica "muy importante" para velar por la seguridad "de todos los españoles y cuidar de su libertad". En este sentido, resaltó que, "si eso es importante para toda España, es especialmente relevante en el caso de las Islas, por su distancia respecto a la Península, por su cercanía con África y porque está inserta en las importantes rutas para España y Europa hacia América".

Por eso, añadió, la labor que realizan aquí las Fuerzas Armadas "tiene una relevancia fundamental a la hora de cuidar de la seguridad de todos los españoles". No en vano, subrayó que Gran Canaria cuenta con una de las cuatro bases navales más importantes de la Armada y ello es "trascendental", ya que, a su juicio, "más de 17 millones de turistas vienen a Canarias por muchos motivos, entre ellos la seguridad y la confianza que otorga la presencia de las Fuerzas Armadas en la defensa de nuestra integridad territorial y de nuestra seguridad como país".

Sus palabras de apoyo a la Base Naval, localizada en la capital grancanaria, no son baladí, ante la polémica sobre el traslado de esta infraestructura militar. A finales de marzo, el Gobierno central accedió a estudiar su reubicación. La propia Cospedal se comprometió entonces a crear una comisión que estudie una nueva ubicación de estas dependencias para que sus terrenos puedan ser destinados a uso ciudadano, así como quién costea el cambio de lugar, cifrado en 400 millones de euros.

Cospedal avanzó esta iniciativa en el Congreso, en respuesta a una pregunta del diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, que le pidió aclarar si se iba a recuperar la base para uso civil, como aprobó la Comisión de Defensa por unanimidad hace ya más de un año.

Pese al anuncio del Ejecutivo, el Ministerio ha iniciado obras en esta Base para residencia de oficiales y suboficiales, circunstancia que se contradice, en principio, con el estudio sobre su mudanza.

Cospedal, que ayer eludió hacer declaraciones a los medios de comunicación, pasó por delante del edificio en obras en dirección al patio de Armas del Arsenal, engalanado para la ocasión con banderas náuticas. En su intervención ante los soldados y marineros, la ministra quiso agradecer el trabajo diario que llevan a cabo en esta Base Naval, que presta apoyo no sólo a buques de la Armada española, sino también a otro tipo de embarcaciones, como los buques de vigilancia aduanera, de salvamento y de asistencia sanitaria.

Exhortó a los presentes a seguir haciendo su trabajo "con la dedicación y el espíritu de servicio a España con el que lo realizan siempre" y les pidió que "no cejen nunca en el empeño". Entre los asistentes, alrededor de 200 personas, entre mandos y miembros de la Sección de Honores del Arsenal, la Unidad de Seguridad de Canarias (Uscan) y la Sección del Mando Naval, entre otras unidades.

Una intensa lluvia cayó casi al finalizar del acto y, tras el desfile, Cospedal acudió a una conferencia sobre el Mando Naval de Canarias, su logística, capacidades de los barcos y unidades desplegadas. Luego, visitó la Infantería de Marina y una muestra del armamento que hay en la Base.

Posteriormente, en torno a las once de la mañana, llegó a la Base Aérea de Gando. Esta vez le acompañó el jefe de Estado Mayor del Aire, el teniente general Javier Salto Martínez-Avial, nombrado en marzo y que anteriormente ejerció como director del gabinete técnico de Cospedal, y antes fue jefe del Mando Aéreo de Canarias (Macan).

Asimismo, acudió a Gando el nuevo director del gabinete técnico de la ministra, el teniente general Miguel Ángel Villarroya Vilalta, que previamente estuvo al frente del Macan, ahora bajo la jefatura de Fernando de la Cruz Caravaca. Igualmente, asistió José Luis Ortiz-Cañavete, jefe de la Base Aérea de Gando, Ala 46 y Comandante Militar del Aeropuerto de Gran Canaria.

Cospedal pasó revista a una unidad mixta conformada por una sección de la Escuadrilla de Honores, Ala 46, Grupo de Alerta y Control (Grualercon) y Macan.

En su alocución, la responsable de Defensa ensalzó la actuación del Ejército del Aire en las Islas, una labor que describió como "muy significativa" en funciones de vigilancia del espacio aéreo, mando y control, salvamento y rescate de vidas humanas y vigilancia de las rutas de transporte en un espacio geográfico "estratégico". Alabó el papel fundamental del Ejército del Aire "para proteger" los intereses comerciales y de seguridad de España, gracias a "la misión de vigilancia y de estar siempre alerta".

Además, avanzó que "parte" del 802 Escuadrón del Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR) viajarán "dentro de no demasiado tiempo" a Sigonella, en la costa este de Sicilia y escenario clave en la lucha contra el tráfico ilegal de seres humanos en aguas del Mediterráneo. En concreto, partirán un avión Delta-4 y una tripulación del SAR, que formarán parte del Destacamento Aerotáctico Grappa, en el marco de la Operación Sophia, para la vigilancia marítima y combatir las mafias que trafican con refugiados.

"El carácter expedicionario del Ejército del Aire está muy presente en esta Base, igual que lo está en todos los aviadores", aseveró Cospedal, que elogió el "carácter valiente, arrojado e inquieto" de las fuerzas aéreas. Eso sí, les pidió que "tengan cuidado, hagan bien su trabajo y que el espíritu de compañerismo y el cuidarse unos a otros no les abandone nunca".

Su ruego resonó en el hangar. Algunos presentes no pudieron evitar recordar a sus siete compañeros fallecidos en sendos accidentes en marzo de 2014 y octubre de 2015, al estrellarse en el mar los helicópteros Super Puma en los que viajaban.

En la actualidad hay dos Super Puma en Gando: uno del modelo antiguo, cuyas características y equipamiento conoció ayer la ministra, y otro de nueva fabricación, en el que subió al término del evento para sobrevolar todas las instalaciones militares en Gran Canaria antes de ir a Lanzarote. Con todo, el Ejército del Aire en las Islas está pendiente de recibir otros dos helicópteros modernos, uno a finales de año y otro a mediados de 2018.