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El Gobierno prioriza la estabilidad de los interinos a la ampliación de la plantilla

El Ejecutivo se propone cubrir el máximo de vacantes tras nueve años de restricciones

José Miguel Barragán, consejero de Presidencia y Justicia. JUAN CASTRO

La Comunidad Autónoma no afrontará todavía un incremento neto de la plantilla de empleados públicos. La prioridad en los próximos dos o tres años es cubrir las vacantes que han dejado los últimos nueve años de restricciones y estabilizar los puestos de trabajo de los cerca de 20.000 interinos y temporales que llevan años cubriendo puestos que no han salido a concurso oposición. El consejero de Presidencia y Justicia del Gobierno regional, José Miguel Barragán, admite que el objetivo primero es que la Administración autonómica "tenga el personal mínimo para funcionar" antes que aumentar la plantilla.

Y es que la crisis y las limitaciones económicas no han finalizado del todo, por lo que no se puede incrementar el gasto de personal de los presupuestos para no poner en peligro los objetivos de déficit y la estabilidad presupuestaria. Por eso la tanda de ofertas de empleo público iniciadas en 2015, 2016 y la próxima de 2017 pretenden cubrir las vacantes acumuladas desde 2008.

Pero Barragán también avisa: los puestos a cubrir son muchos, tanto vacantes como las plazas ocupadas por interinos, y la complejidad de los procedimientos y los tiempos impiden que se puedan sacar todas las plazas vacantes antes de finalizar la legislatura, pero sí se hará el mayor esfuerzo posible para convocar el máximo de ellos. "Lo que nos están pidiendo los sindicatos y la sociedad en general es que demos primero estabilidad a quienes llevan años trabajando en la Comunidad Autónoma, buscando una forma dentro de la legalidad que dé garantías de que estas personas tengan una oportunidad de estabilizar su empleo", añade el dirigente.

La consejería ya ha comenzado a identificar las plazas de empleo temporal que son susceptibles de estabilización, un proceso que espera culminar en septiembre. Al mismo tiempo, el Ejecutivo trabaja también en la elaboración de un primer borrador de Plan de Estabilización del Empleo Temporal cuya presentación a la Mesa General de Negociación de Empleados Públicos está prevista para la segunda quincena de septiembre.

La intención, explica el consejero José Miguel Barragán, es negociarlo con los sindicatos a lo largo del último trimestre para poder aprobarlo en Consejo de Gobierno este mismo año.

El Plan de Estabilización definirá cuestiones tales como qué plazas concretas se ofertarán, en qué plazos, qué procesos de selección se emplearán y los requisitos para participar, entre otros aspectos.

Interinidad

La interinidad en la Comunidad Autónoma es tanto en la parte de Administración General como en Sanidad y Educación, a pesar de que estos dos últimos servicios públicos no han estado sujetos a unas restricciones tan importantes como el resto, ya que su tasa de reposición era más elevada. Sin embargo, esta situación ha afectado a otros servicios también destacados de la Administración como los departamentos vinculados a las políticas sociales, vivienda, empleo, tributos o medio ambiente, lo que ha provocado serios quebraderos de cabeza a los empleados públicos de los mismos y la acumulación de miles de expedientes por tramitar (menores, dependencia, ayudas sociales, PCI, ayudas de vivienda, políticas de empleo, persecución del fraude fiscal, disciplina urbanística, etcétera) que han afectado seriamente a la población.

Por eso el Gobierno ha activado el mecanismo de la declaración de "sectores prioritarios" con el fin de dar prevalencia a la necesidad de cubrir puestos vacantes en este tipo de departamentos bien sea por interinidad o por contratos y en las oposiciones también darles prioridad. Según Barragán, "en los sectores prioritarios no se trata de cubrir el 100% de las relación de puestos de trabajo, sino de las plazas que se requieran para resolver los principales problemas tirando de las listas de empleo y cubrir esas vacantes de forma más rápida hasta que se convoquen las oposiciones que tienen una duración mínima de seis meses de tramitación". Con todo, el objetivo es reducir hasta en un 90% la tasa de temporalidad de la Administración en determinados sectores estratégicos.

Por lo pronto, el departamento que dirige José Miguel Barragán se encuentra enfrascado en las convocatoria de las oposiciones de 2015 y 2016, en las que se convocan más de 600 plazas. Las primeras 103, para cubrir por turno libre o promoción interna puestos de administradores generales, ya están en marcha y en los próximos meses se irán convocando el resto. Barragán puntualiza que el personal que se incorpore a la Administración mediante estas pruebas irán a diferentes departamentos donde hay vacantes, entre ellos los sectores prioritarios donde son más necesarios para evitar que la situación sea más gravosa para el Ejecutivo.

Junto a estas oposiciones también las comunidades autónomas, el Estado y los sindicatos ultiman el mecanismo para realizar las ofertas extraordinarias de empleo que puedan dar estabilidad a la gran mayoría de los trabajadores que ahora son interinos. Se trata de unos 20.000 empleados públicos que no tienen aún una plaza fija en la Administración autonómica y que, algunos de ellos, llevan hasta diez y más años trabajando sin que tengan el puesto de forma estable por oposición.

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