El magistrado Carlos Vielba ha reconocido ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que fue el autor de unas manifestaciones xenófobas durante una conversación grabada de forma clandestina el 23 de septiembre del pasado año por su compañero, el juez Salvador Alba, en las que llamó "mafiosos" a los jóvenes rusos. Señala que fue en tono "humorístico" mientras compartía un café en el office de la oficina judicial con sus compañeros de la Sección Sexta de la Audiencia de Las Palmas. El promotor de la Acción Disciplinaria del CGPJ considera que no cabe incoar un expediente disciplinario contra el magistrado por estas expresiones "genéricas", al margen de que fueran "desafortunadas".
El Consulado de la Federación de Rusia en Canarias presentó una queja el pasado 17 de abril ante el promotor de la Acción Disciplinaria pidiendo que se identificara al juez que había realizado esas expresiones "xenófonas y gravemente injuriosas" contra los ciudadanos rusos, depurar las responsabilidades oportunas, así como determinar si ha existido una infracción reiterada del deber de abstención del magistrado en los procedimientos en los que haya ciudadanos rusos involucrados.
El abogado del Consulado ruso, José Antonio Penichet, recibió la respuesta del promotor de la Acción Disciplinaria, José Sierra, el pasado 8 de agosto, en la que se identifica a Vielba y se expone que, aunque ha participado en nueve causas contra Vladimir, Julia e Igor Kokorev, la familia hispano-rusa acusada de ser los presuntos testaferros del dictador de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, y que llevan en la cárcel de Juan Grande desde septiembre de 2015, las expresiones del magistrado sobre los rusos, en una "una conversación informal" con otros jueces, son "genéricas y no concretadas a ciudadanos incursos en asuntos conocidos por el magistrado, lo que excluye que estuviéramos ante una omisión del deber de abstenerse" de esos procedimientos, y no cabe incoar expediente disciplinario.
Vielba reconoce ante el promotor de la Acción Disciplinaria ser el autor de estas expresiones, tras saltar su nombre en el periódico digital www.confilegal.com el pasado 25 de abril, hecho que puso el abogado del Consulado ruso en conocimiento del órgano judicial.
La grabación clandestina recoge una charla que se desarrolló en el office del tribunal y en donde intervinieron Alba, Emilio Moya, Carlos Vielba y José Luis Goizueta. El juez Alba aportó el audio en el complejo proceso que mantiene con Miguel Ángel Ramírez por otros hechos. En esa conversación se produjeron estos comentarios en los que Vielba llamó "mafiosos" a los jóvenes rusos y a los italianos del sur de Roma, así como afirmó que las rumanas "son todas putas".
El juez admite en su declaración que el autor de las expresiones "efectivamente fui yo, las mismas se efectuaron, por muy desafortunadas que sean, se realizaron en tono humorístico en el marco de una conversación mantenida en el office de la oficina judicial cuando los miembros de esta Sección compartíamos un café y en atención a la confianza que tal situación genera".
Acto seguido, el juez Vielba relaciona las causas en las que ha intervenido con ciudadanos rusos, en las que, entre otros investigados, "se encuentran los miembros de una familia de origen ruso y que también ostentan la nacionalidad española", siendo todos los recursos "desestimatorios", indica.
El Consulado ruso está estudiando si recurrir esta resolución para lo que tiene un mes de plazo. Además, José Antonio Penichet ha informado a los tres abogados de la familia Kokorev sobre la identidad del magistrado que hizo las declaraciones xenófobas y sobre su intervención en las nueve causas por si deciden recurrir las mismas.
El Tribunal Superior de Justicia de Canarias desestimó el pasado abril una queja similar presentada por el Consulado, tras la divulgación de los audios el pasado noviembre.
