El buque MV Cheshire ya está en aguas al sur de Gran Canaria, exactamente a unas 48 millas náuticas -89 kilómetros- de la costa. Sin que suponga "ningún riesgo" para el resto de navegantes sin que existan posibilidades de que el humo que emiten actualmente sus bodegas uno y dos llegue a la costa de la Isla, tal y como aseguran tanto desde la empresa propietaria Bibby Line Limited como desde los técnicos de Salvamento Marítimo, el barco no estará fijo en una zona, sino que se irá moviendo -remolcado por el Red Sea Fos- según diferentes parámetros a tener en cuenta, tales como las condiciones meteorológicas o la mar, entre otras. "Está en aguas internacionales, fuera aguas territoriales españolas", determinan desde Salvamento.

A su lado continúan los remolcadores VB Hispania -donde están a bordo los técnicos encargados del plan de salvamento con el material necesario para intervenir- y el Miguel de Cervantes prestando soporte, mientras que el Jacques 2 ha sido liberadoJacques 2. En este momento, los técnicos siguen con las labores de enfriamiento de la estructura, ya que el granelero aún presenta elevadas temperaturas, lo que imposibilita que los especialistas traídos desde Holanda y Gibraltar -por Resove Marina, contratada por los dueños del barco incendiado para coordinar el salvamento- puedan subir por segunda vez a bordo. Además, el humo todavía presente en las bodegas uno y dos aleja las posibilidades de que estos expertos pisen el MV Cheshire.

La carga de las bodegas que siguen activas todavía se está descomponiendo, posicionándose en una fase más adelantada y próxima a la inactividad la dos, cuyo humo es de color naranja. Mientras esta va mejorando, los trabajos se centran en la uno.

Con el acercamiento hasta el punto elegido por Salvamento, el viento ha aumentado, según explica Bibby Line Limited, de manera que "ahora mismo, el humo cubre todos los puntos de barco, lo que impide el acceso, ya que se trata de gas tóxico", destaca. "Aunque no hay muchísimo viento, si la intensidad es media ya es suficiente para que el humo se propague", señala sin olvidar mencionar que "según previsiones, mañana bajará bastante, lo que ayudará". Pese a ello, no saben con exactitud cuándo podrán subir a bordo los técnicos para fulminar la reacción química atacando directamente en los focos de calor. "Es imprevisible, porque depende también de las condiciones del mar y de la evolución de los fertilizantes en combustión", añade.

Si accederán por aire o por mar, cuando llegue el momento y se den las condiciones, es algo que todavía no tienen claro. Aún así, la misma compañía resalta que en la distancia -más próxima a la costa- en la que se encuentra ahora el buque "será más factible el acceso por helicóptero para transportar recursos y personas". Otro dato alentador es que, según los propietarios, "las olas bajarán mañana un metro y medio, lo que lo hace todavía más accesible".

Alrededor, los barcos de la zona continúan su marcha respetando la distancia de seguridad marcada por Salvamento Marítimo de tres millas náuticas. Aunque no se haya estimado una zona de exclusión reclamada por Resove Marina, todos los navegantes están al tanto de la situación. Respecto a Aire, Fomento garantiza que la misma zona de exclusión no era necesaria puesto que la columna de humo que emite el barco no llega a una altitud que afecte y, además, porque tampoco influye en el tráfico existente en la zona. "De igual manera, estamos coordinados en todo momento con Salvamento Marítimo", afirman desde el Ministerio. Una postura apoyada por el subdelegado del Gobierno en Las Palmas, Luis Molina, ya que apunta que "los técnicos dicen que se puede seguir con las labores sin esa medida y creemos que es lo más acertado y prudente".

Molina lanza, además, un mensaje de tranquilidad a la población. "Está todo absolutamente controlado y no hay ningún riesgo de que se hunda ni, por tanto, para la vida marina, porque la combustión mejora en las bodegas en las que sigue activa y no ha afectado en la zona de máquinas", fija. Un dato que también sostienen desde Bibby Line Limited: "No hay ningún peligro".

Tampoco lo hay referente a la posición del carguero a partir de ahora a 40 millas de la costa al sur de Gran Canaria. "Los técnicos la consideran idónea para seguir con las labores de enfriamiento y se trata de una distancia de seguridad más que suficiente para asegurar riesgo cero", agrega el subdelegado del Gobierno.

En cuanto a las declaraciones llevadas a cabo por el presidente de la Federación Regional de Cofradías de Pescadores de Canarias, Fernando Gutiérrez, en nombre de la agrupación, que calificaban de "grave amenaza" la situación del buque por miedo a que se hunda y a un posible vertido que llegue a la costa, Molina explica que "los casos con los que comparan lo que está ocurriendo no tienen nada que ver con este y deben explicar el por qué de esta alarma innecesaria sin fundamentos, porque no es real que exista ese riesgo, según me confirman los técnicos en la materia". La empresa propietaria reafirma lo mismo que el subdelegado y señala que "no se han informado correctamente".

Los costes y pérdidas que la problemática ha ocasionado a la compañía propietaria todavía no se han contabilizado, pero fuentes de la misma aseguran que se trata de "millones". "Además todavía queda la reparación, pero lo importante ahora es solucionar el problema, el resto ya se contemplará", concluyen.