Después de 15 días, desde que el buque MV Cheshire comenzó a arder debido a un aumento de las temperaturas que prendió la carga de fertilizantes que llevaba a bordo, el granelero ya no emite humo y, en principio, ha dejado de combustionar, según indican fuentes cercanas a la operación. Las bodegas uno y dos, que eran las últimas que permanecían activas, han cesado de expulsar el gas tóxico resultado de la carga en llamas, aunque todavía no se sabe con seguridad si esta se ha consumido por completo.

Este paso supone un gran avance para la empresa propietaria del carguero Bibby Line Limited, la misma que espera que durante el día de mañana los especialistas -traídos desde Holanda y Gibraltar por la compañia contratada por los dueños para gestionar el plan de salvamento, Resove Marina- puedan subir a bordo del buque para valorar los daños y tomar decisiones sobre las labores a llevar a cabo. Aún así, todo depende de la temperatura que presente la estructura.

Una vez dentro, procederán a fulminar la reacción química, en caso de que quede carga todavía en combustión, y lo harán con unas lanzas especiales llamadas Víctor que inyectan agua directamente en los focos de calor, medidos con una cámara termográfica. Si no es necesario, procederán a estudiar en qué condiciones está la sala de máquinas y si esta ha sufrido daños importantes o no. "La prioridad, una vez que se pueda abordar el buque, será hacerlo seguro para trabajar en la recuperación", apuntan los propietarios.

Aunque en un principio todo indicaba a que la embarcación sería reparada en el Puerto de La Luz para continuar hacia el destino que los propietarios fijen, según las fuentes citadas cercanas a la operación, en principio no está previsto que entre en dicho puerto de la capital grancanaria. No sólo para ser arreglado, sino que tampoco, como mínimo, para adecuarlo de cara a su posterior reparación.

Por el momento, el MV Cheshire sigue siendo remolcado por el Red Sea Fos que lo mantiene a unas 54 millas náuticas del sur de Gran Canaria. Si el rumbo hacia el puerto de arreglo se hará a través del mismo remolcador o funcionando por sí mismo, todavía no se sabe, ya que depende de los resultados de la inspección que los expertos lleven a cabo en los próximos días, si todo sigue tal cual lo previsto y no hay cambios.

A pesar de que el punto asignado por Salvamento Marítimo para el granelero eran unas 40 millas náuticas hasta la costa, desde Bibby Line Limited señalan que, a una velocidad de unos dos nudos, "se está remolcando entre dos posiciones, desde 40 millas náuticas al sur de Gran Canaria a una posición diez millas náuticas al este".

En cuanto a las razones que lo justican, la misma empresa explica que se debe a que en un primer momento estaban situados en medio de un canal de tráfico marítimo, "por lo que tuvimos que alejarlo para que las embarcaciones no se perjudicaran entre sí". Además, tanto Bibby Line Limited como Salvamento Marítimo garantizan que los navegantes por la zona reciben regularmente mensajes para que tengan en cuenta la presencia del buque británico y no hayan inconvenientes.

A su lado continúan los remolcadores VH Hispania y VH HispaniaMiguel de Cervantesejecutando labores de enfriamiento de la estructura echando agua sobre la misma y prestando soporte. Pese a que la situación mejora y el humo ha dejado de ser un problema, los dueños destacan que los técnicos esperarán hasta que sea del todo seguro acceder para comenzar a trabajar en su recuperación.

Evitar una "catástrofe natural"

  • Varias organizaciones -tales como la Federación Regional de Cofradías de Pescadores de Canarias y el Grupo de Expertos no Gubernamentales del Sistema Mundial de Socorro- se han manifestado en contra de las medidas llevadas a cabo para frenar las posibles consecuencias que la situación del buque -tras haberse incendiado su carga de fertilizantes- pueda ocasionar. A pesar de que el humo ha cesado, la mercancía por el momento ha dejado de combustionar y se ha informado, tanto por parte de la empresa propietaria Bibby Line Limited, como de los técnicos implicados y del subdelegado del Gobierno en Las Palmas, Luis Molina, que no hay "ningún riesgo ni posibilidad de hundimiento", el partido político Podemos da a conocer su preocupación ante una posible "catástrofe natural".La agrupación exigió, ayer, "medidas urgentes" para evitar que ocurra "a causa de la situación del MV Cheshire", al que califica como una "gigantesca bomba flotante". "Lo que está sucediendo en nuestras costas es lo mismo que lo que pasó en Galicia con el Prestige, pero esta vez con un posible vertido contaminante de nitrato de armonio en lugar de petróleo", resaltó, en nombre del partido, su responsable del área de Emergencias del Consejo Ciudadano Autonómico, Tanausú Alemán.