La cúpula del Centro Canario Nacionalista (CCN) busca acuerdo casi in extremis con la Fiscalía Anticorrupción para evitar el banquillo. El Ministerio Fiscal les acusa de la presunta comisión de un delito contra la Ley Electoral y malversación de fondos por los que pide cuatro años de prisión para el fundador y presidente de la formación nacionalista, Ignacio González Santiago, y para el abogado José Luis Langa, mientras que para el resto de los inculpados -Pedro González Santiago y Juan Pedro Ruiz- interesa una pena de seis meses de prisión. Para el último de los acusados, Ignacio González Martín, expresidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife y expresidente del Partido Popular en Tenerife, se solicita una pena de tres años y seis meses de prisión por el delito de malversación de fondos.

La Sección quinta de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha desestimado todos los recursos presentados por los acusados, una vez que se conoció, en abril del año pasado, que el Ministerio Público había presentado un escrito de acusación provisional.

En las últimas horas ha trascendido, de fuentes judiciales, el interés por parte de algunos de los acusados de llegar a un acuerdo de conformidad. Esto supondría que la dirección CCN reconocería su responsabilidad en los hechos investigados y que giran en torno a la financiación irregular de la que se nutrió el partido en la campaña electoral de 2007, cuando empresas del círculo de la familia González Santiago inyectó más de cinco millones de euros que se añadieron a los algo más de dos millones que declaró haber recibido la formación en subvenciones y aportaciones privadas.

En total, Hacienda ha logrado identificar pagos opacos e irregulares a esta formación, hoy sin actividad política, de más de siete millones, aunque los miembros de la Policía Judicial que se hicieron cargo de las investigaciones sospecharon desde un principio que la cuantía de dinero recibida para sufragar las campañas de publicidad y marketing debió de ser aún más elevada.

Trama

Según el escrito de acusación de Anticorrupción "con ánimo de eludir los límites establecidos de gasto electoral [dos millones de euros para una formación con la representación institucional que tenía el CNN], los cinco acusados se pusieron de acuerdo para poder financiar la campaña de forma que fueran varias de las empresas controladas por la familia del candidato a la Alcaldía Santa Cruz de Tenerife, Ignacio González Santiago, las que hicieran efectivos los gastos publicitarios derivados de la misma".

Para ello, González Martín, como administrador de esas empresas, habría dado las órdenes oportunas para que los gastos electorales fuesen facturados como servicios prestados a esas sociedades y las cuentas del CCN se acomodaron "para que no se superara los límites establecidos".

Juan Inurria, letrado de José Luis Langa, confirma la negociación por parte de algunos de los acusados, pero no sería el caso de su cliente. "Nosotros", subrayó "cuando tengamos una propuesta por parte de la Fiscalía nos pronunciaremos" a diferencia de lo que han hecho "otras partes, que se han adelantado muy rápido. Aunque entendemos también por qué lo han hecho", añadió para luego destacar que desde su opinión "se han precipitado por alcanzar un acuerdo sobre una propuesta que nosotros, por ahora, desconocemos".

Inurria incidió en que "a mis compañeros letrados de las otras partes, aparentemente, les han propuesto una conformidad y, aparentemente han dicho que sí, por lo que he conocido".

El abogado manifestó también la extrañeza que le causó, desde que asumió la representación letrada de José Luis Langa, cuando ya estaba realizada toda la instrucción de la causa, la petición de cuatro años de prisión que pretende la Fiscalía, cuando mi cliente es una persona que pasaba por allí [por el CCN] y se ha puesto el ventilador sin él tener nada que ver". "Créame que con todos los convencimientos él [Langa] no debería estar en el escrito de acusación, pero esta es una cuestión que habría que demostrar durante la celebración del juicio oral", concluyó Inurria.