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El atasco del presupuesto pone a las Islas en guardia por el frenazo a la recuperación

El Archipiélago se juega como mínimo 140 millones en financiación, 75 en el convenio de carreteras y la posible mejora de la bonificación aérea a la Península

Fernando Clavijo en el Parlamento canario. JOSÉ LUIS GONZÁLEZ

La inestabilidad política en España por el conflicto catalán está empezando a sembrar dudas sobre la propia estabilidad económica y las expectativas de crecimiento en el corto y medio plazo, tanto en el conjunto del Estado como específicamente en la mayoría de los territorios. La prórroga de los presupuestos estatales para el 2018 en espera de lo que ocurra hoy en Cataluña, que de momento es temporal pero que muchos temen definitiva, ha puesto en guardia a la mayoría de comunidades autónomas y particularmente a Canarias, donde el presumible y necesario apoyo de las dos formaciones nacionalistas isleñas -CC y NC- a unas nuevas cuentas estatales supondría una mejora sustancial de la ficha financiera canaria respecto a las de 2017, que en sí mimas ya fueron las mejores con diferencia desde la crisis.

La incertidumbre sobre el escenario político y económico ha llevado a la consejera de Hacienda, Rosa Dávila, a reconocer que no podrá presentar, en principio, unos presupuestos regionales en noviembre tan expansivos como los que tenía previstos, y el temor que se ha instalado en los agentes sociales y económicos de las Islas es que el ilegal 1-O catalán acabe frustrando la recuperación y la dinámica de creación de empleo en marcha desde hace dos años.

Esta misma sensación de alarma, con diferencias según los casos, se ha instalado en el conjunto de las comunidades autónomas, donde impera un clima de preocupación por un atasco presupuestario que deja en el aire sus promesas de aumentar inversiones, incrementar plantillas y subir salarios. El inicio o consolidación de la etapa expansiva en inversión que pretenden los gobiernos regionales queda frustrado así hasta que uno de los árbitros de la tramitación presupuestaria, el PNV, aclare si está dispuesto a sentarse a negociar con el Gobierno central el apoyo a un nuevo proyecto.

De momento, el Gobierno de Canarias sigue confiando en que los intereses del PNV en hacer posible esos nuevos presupuestos para completar los pactos del cupo vasco alcanzados ya en los de 2017, permita reanudar en las próximas semanas la dinámica de negociación, en la que la propia CC está participando intensamente con el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, y con otros miembros del Ejecutivo estatal. En espera de que conocer el desenlace del 1-O y el horizonte político en Cataluña de los próximos días y semanas, los contactos entre ambas partes siguen su curso con la esperanza, como sostienen en Moncloa, de que "en dos o tres semanas" se pueda presentar el proyecto en el Congreso y acelerar la tramitación para no tener que prorrogar las cuentas ahora en vigor.

Nuevo modelo de financiación

En todo caso, la duda y el temor se ha instalado en los departamento de hacienda regionales, que además de la prórroga presupuestaria temen por un nuevo retraso en la reforma del sistema de financiación autonómica. Canarias es quizá la comunidad que más se juega en cada uno de estos escenarios. De entrada, sin nuevos presupuestos perdería los 140 millones de diferencia entre lo que percibió en 2017 por este concepto (229 millones), donde por primera vez participaba del Fondo de Competitividad al excluirse del sistema de reparto los recursos del REF canario, y lo que debería recibir en 2018 (360 millones) según lo pactado entre ambos Ejecutivos.

Este posible recorte en los ingresos de la comunidad autónoma, que van directamente a financiar sus servicios básicos -educación, sanidad y servicios sociales- produciría un frenazo a la consolidación fiscal canaria. Con ello, se impediría llevar a cabo uno de los objetivos del Gobierno canario para este mismo año como es poder destinar a inversión parte del superávit que por primera vez en años espera lograr en el ejercicio de 2017, algo que tiene pactado con el Estado para que además no compute en la regla de gasto.

El otro gran capítulo en el que Canarias se vería afectada por una prórroga significativa o definitiva de las cuentas estatales es el de la inversión y dotación de los convenios, sobre todo en materia de infraestructuras. Ambas partes negocian en estos momentos las cantidades que debe recogerse en 2018 para cada uno de ellos y aunque hay algunas discrepancias, es seguro que en todos habrá subidas significativas. El más importante es el de carreteras, que en 2017 se dotó con 194 millones (81 más que en 2016) y para el que el Gobierno regional reclama en 2018 una cifra cercana a los 250 millones, es decir, un incremento de 75 millones con el que ir recuperando los 400 que la comunidad puso de recursos propios durante la crisis.

El ministerio de Fomento y el Gobierno regional tiene pactado un nuevo convenio de 2.500 millones para 12 años, pero sigue abierto el debate sobre el reparto anual del mismo. Para tratar de cerrar un acuerdo al menos para la partida del 2018, el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, tiene previsto entrevistarse esta semana con el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. La prórroga presupuestaria restaría fondos para el recién recuperado convenio de infraestructuras turística, y los de costas y obras hidráulicas.

El otro capítulo en el que Canarias saldría perdiendo por la prórroga de las cuentas estatales es el de las subvenciones al transporte, sobre el que está ya en debate por qué fórmula a emplear para tratar de abaratar los vuelos a la Península. Este será una de las piezas claves del hipotético acuerdo que alcance Montoro con NC para lograr el voto de su diputado de esta formación, Pedro Quevedo, como lo fue el incremento de la subvención del transporte interinsular del 50 al 75% en las cuentas en vigor. Aunque NC se inclina por el establecimiento de precios máximos en el marco de la obligación de servicios públicos (OSP) para en determinadas rutas a la Península, el Gobierno regional y el propio ministerio de Fomento la rechazan por considerar que romperá la competencia y será contraproducente respecto al objetivo perseguido. Una rebaja de las tasas aeroportuarias o un incremento de la bonificación para los residentes (ahora en el 50 % del coste del billete) son las alternativas que se barajan.

En materia de subvenciones al transporte, Canarias también podría contar en 2018 con una mejora de los contratos-programas para el transporte por carretera.

En este marco, el ministro Montoro señaló hace unos días que la prórroga presupuestaria frenaría el desarrollo de la agenda canaria pactada con el Gobierno de Clavijo, y mencionó como elemento central el hecho de que medidas importantes contempladas en ella se fijan en le reforma del REF económico que empezará a tramitarse de inmediato en el Congreso y cuyo plazo de presentación de enmiendas parciales concluye el próximos martes.

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