Diálogo dentro de la legalidad y reforma de la Constitución. Los grupos políticos representados en el Parlamento canario lanzaron ayer un mensaje de unidad en torno a la situación generada por el conflicto de Cataluña y demandaron una solución negociada que pasa por abordar cambios en la Carta Magna, con el fin de actualizar el modelo territorial del Estado y en el que Canarias también se sienta cómoda en su encaje dentro del contexto nacional.

La declaración de independencia por parte del Parlamento de Cataluña fue objeto del debate en el pleno del Parlamento en el marco de las preguntas de los grupos al presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo. Y el jefe del Ejecutivo fue claro y taxativo: o se está con la Constitución y la legalidad o no se está, no hay medias tintas.

Pero la crispación política, social y económica provocada por la deriva soberanista en Cataluña también afecta directamente a Canarias, aunque esté lejos del epicentro del problema. Y tanto los portavoces de los grupos parlamentarios como el presidente Clavijo se encargaron de recordar que el Archipiélago se juega mucho en este escenario de incertidumbre. Para empezar la prórroga del presupuesto del Estado, algo que no estaba previsto y que proyecta sombras sobre las cuentas autonómicas del próximo año. El jefe del Ejecutivo advirtió que el escenario es "menos optimista y más prudente" pero que es la obligación y la responsabilidad del Gobierno presentar los presupuestos.

Pero no solo son los presupuestos, sino también el sistema de financiación autonómica, la Ley del Régimen Económico y Fiscal (REF), los varios convenios sin firmar o cuestiones como el abaratamiento de los billetes aéreos a la Península. Una situación compleja pendiente ahora de lo que suceda en Cataluña.

La Comunidad Autónoma pone sobre la mesa sus propuestas: diálogo dentro de la Constitución y la legalidad, propiciar una reforma de la Carta Magna en la que todas las comunidades se sientan cómodas con sus singularidades y que sea la Conferencia de Presidentes el marco para este diálogo, al ser un órgano que está por encima de los intereses de los partidos políticos. Fernando Clavijo resaltó la posición unánime de los partidos políticos canarios para que prevalezca el sentido común ante la tensión política y social que está generando el problema catalán y manifestó su "orgullo" porque Canarias sea tierra de diálogo y de convivencia sin saltarse las leyes.

Lo que sí causó cierta sorpresa en algunos grupos fue la contundencia con la que el presidente del Ejecutivo se pronunció tras la intervención del presidente regional del PP, Asier Antona. Para Clavijo no hay posibilidad de equidistancia en este asunto, es decir, o se está dentro de la ley o no se está. "Quizá soy demasiado rígido pero sólo veo dos bloques: los que cumplen la ley y los que no, y aquí no hay líneas grises ni difusas porque o se está en el marco de la Constitución o no se está". En este contexto, el Ejecutivo cree que se puede estar en el momento idóneo para promover una reforma de la Constitución y así aprovechar para mejorar el encaje de Canarias en el texto constitucional. No obstante, el presidente puntualizó que esta reforma debe hacerse "con sosiego, sin chantajes y sin una pistola en la sien".

Con matices y con algunas diferencias, los diferentes grupos políticos se posicionaron en líneas generales por una solución negociada al conflicto de Cataluña dentro del marco legal pero, eso sí, criticando con dureza los posicionamientos de las fuerzas independentistas catalanas de vulnerar el Estado de Derecho de forma reiterada.

La equidistancia no vale para el PP ni para CC, a tenor de las manifestaciones de Clavijo. Asier Antona fue el más contundente y demandó un pronunciamiento claro del Parlamento canario ante el "suicidio político" al que el Gobierno catalán está conduciendo a la comunidad autónoma. En este marco de inestabilidad es cuando el presidente regional de los populares canarios ofreció su respaldo al Gobierno para los presupuestos autonómicos de 2018, con una negociación que se inició ayer mismo tras la reunión entre el líder del PP canario y el presidente del Gobierno.

Sin que sirva de precedente, la portavoz de Podemos en la Cámara autonómica, Noemí Santana, se mostró de acuerdo con la declaración realizada por el Gobierno tras lo sucedido el pasado 1 de octubre y valoró que el Ejecutivo regional se posicione por el diálogo y la reforma de la Constitución. La secretaria general del partido morado en Canarias recordó que el Gobierno central ha incumplido la Constitución con las Islas en los últimos años y que ha sido la comunidad peor financiada. Por ello lanzó una de las principales consignas de Podemos: el régimen del 78 está caduco y hace falta un nuevo modelo territorial para el Estado español.

En una línea muy similar se situó el portavoz de Nueva Canarias, Román Rodríguez, que se mostró de acuerdo con aplicar la ley para los que la incumplen pero que, de forma paralela, también se abra una camino de concertación y búsqueda de soluciones para solucionar el complejo puzzle territorial en el que se encuentra España después de casi 40 años de autonomías.

El único grupo político que no habló del problema territorial surgido en Cataluña fue el PSOE, que mantuvo su pregunta relacionada con la política de nombramientos del Gobierno canario. La aún presidenta del grupo parlamentario, Patricia Gutiérrez, hizo su última pregunta a Clavijo desde ese puesto para criticar la colocación de dirigentes nacionalistas defenestrados en diferentes puestos del Ejecutivo regional.