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Los impuestos bajarán en 2018 pero sin la rebaja "lineal" del IGIC que pide el PP

La reforma fiscal será clave en las conversaciones para los presupuestos

Fernando Clavijo (d.) y Asier Antona sonríen, ayer, momentos antes de comenzar la reunión en la sede de la Presidencia de Santa Cruz de Tenerife. CARSTEN W. LAURITSEN

El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, garantizó ayer que su gabinete aprobará una reforma fiscal para aliviar la carga tributaria que soportan los ciudadanos de las Islas. Esto, sin embargo, no supone en ningún caso que el Ejecutivo autonómico esté dispuesto a dar su brazo a torcer ante las exigencias del Partido Popular (PP) y que vaya a dar luz verde a una rebaja "lineal" del Impuesto General Indirecto Canario (IGIC), según puntualizaron fuentes del Gobierno.

Clavijo y el presidente del PP en la Comunidad Autónoma, Asier Antona, quien también preside el grupo parlamentario de la fuerza política, se reunieron en la sede de la Presidencia de Santa Cruz de Tenerife en una primera toma de contacto para negociar los presupuestos de la región del próximo ejercicio. Uno y otro coincidieron al término del encuentro en la predisposición de la otra parte para llegar a un acuerdo que gire en torno a tres premisas: potenciar los servicios públicos esenciales, como la sanidad y la educación; contribuir en la medida de lo posible a la buena salud de los sectores productivos con el objetivo de crear más y mejor empleo; y, en palabras de Antona, sacar adelante una reforma tributaria que "alivie la presión fiscal a las familias, a los ciudadanos y a las pymes" (pequeñas y medianas empresas).

La reforma fiscal fue precisamente uno de los principales escollos que terminaron por frustrar la entrada del PP en el Gobierno tras la destitución de los consejeros socialistas el pasado diciembre. El jefe del Ejecutivo regional calificó de "necesario" que se apruebe esta reforma largamente demandada por el PP, si bien, y como ya ocurriera en las frustradas conversaciones para la incorporación de los populares a la mesa del Consejo de Gobierno, no habrá una bajada "lineal" del IGIC, esto es, una reducción del tipo general del impuesto del 7 al 5%, que es precisamente el punto más controvertido. "Evidentemente, el IGIC también hay que tocarlo, pero serán los grupos técnicos los que tengan que trabajar, porque al final todas esas reformas repercuten en los ingresos, y lo que tenemos que conseguir es fortalecer los servicios públicos, mejorar el empleo y mejorar la economía y, sobre todo, que el alivio fiscal vaya a aquellas familias que menos tienen", argumentó Clavijo.

Devolver la factura

El presidente del Gabinete del Archipiélago, que también confirmó que se bajará el tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), reconoció, en línea con los argumentos que vienen esgrimiendo desde el PP, que una parte de lo que la Hacienda de las Islas ha recaudado en los últimos ejercicios debe ahora "ser devuelta" a las familias de Canarias, "sobre todo a aquellas que tienen una renta media y baja, de modo que podamos seguir trabajando en la mejora de la redistribución de la renta y que podamos corregir la desigualdad entre las familias que se produjo a lo largo de la crisis".

Ello no implica, no obstante, que el Ejecutivo esté dispuesto a ceder y devolver el tipo general del IGIC al 5%, que era el porcentaje que se aplicaba hasta que el gobierno de Paulino Rivero decidió en 2012 subirlo hasta el 7% para aumentar los ingresos de las depauperadas arcas públicas.

El propio Antona evitó al término de la comparecencia referirse a la rebaja del tipo general del impuesto indirecto y se limitó a apuntar que "hay que tocar el tramo autonómico del IRPF y evidentemente hay que tocar también el IGIC". De hecho, el presidente del PP agregó que habrá que ver los términos de los cambios en el sistema tributario e incluso dijo que, a su juicio, el "titular" debería ser que "haya un alivio fiscal, una menor presión fiscal en el bolsillo de los canarios; yo creo que esa es la voluntad que tenemos que estudiar", sentenció.

Hay que recordar que la recaudación de la Agencia Tributaria Canaria vía IGIC -la principal fuente de ingresos impositivos de la Comunidad Autónoma- ha aumentado exponencialmente en los últimos ejercicios hasta romper todos sus registros históricos. El año pasado, la factura del IGIC llegó a la friolera de 1.535 millones de euros, una cantidad que supone más de 400 millones más que en el ejercicio de 2006, el último del largo período de bonanza económica en las Islas.

Al amparo de estas cifras, el PP viene exigiendo que se aligere el tributo ahora cuando la economía regional ha comenzado a despegar, lo que, a su juicio, impulsaría el consumo interno. El Ejecutivo y Coalición Canaria consideran que cabe una reforma que alivie la presión fiscal, punto en el que hay plena coincidencia con los populares, tal como evidenciaron ayer Clavijo y Antona, pero, en cambio, no ven factible aún una rebaja lineal del IGIC por el riesgo que podría suponer para el mantenimiento y fortalecimiento de los servicios públicos.

En consecuencia, de nuevo la cuestión fiscal aparece como el primer obstáculo para una aprobación mayoritaria de los presupuestos en la Cámara. La Agrupación Socialista Gomera ya ha avanzado su apoyo a las cuentas y el presidente Clavijo se verá hoy las caras con el líder del Partido Socialista Canario, Ángel Víctor Torres, antes de hacer lo propio con Nueva Canarias.

Aunque la cita sirvió fundamentalmente para abordar los presupuestos, Clavijo explicó que el primer punto de conversación había sido la situación que atraviesa Cataluña por el radicalismo de los secesionistas, una situación que "afecta a todo el país y, por supuesto, afecta también a Canarias", admitió el dirigente nacionalista. En esta línea, el presidente regional hizo un llamamiento generalizado a tener "altura de miras, humildad y vocación de servicio social", unos valores que aseguró haber observado en Antona para que puedan sacarse adelante las cuentas.

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