El Partido Socialista Canario (PSC-PSOE) anunció ayer que enmendará la ley de altos cargos presentada por el Gobierno regional en pos de una mayor transparencia mientras que, en paralelo, transmitía a sus representantes en el Parlamento la conveniencia de no dar información sobre sus méritos académicos. Una decisión que ha dividido el grupo socialista en la Cámara regional en dos bloques: el de quienes no tienen ningún inconveniente en mostrar y acreditar los títulos, diplomas y reconocimientos publicados en el sitio web de la institución que preside Carolina Darias y el de quienes no están por la labor de facilitar la comprobación de que los méritos académicos que afirman reunir efectivamente se corresponden con la realidad de sus carreras formativas.
El posgrado que el presidente del Partido Popular (PP) en Canarias, Asier Antona, lucía sin tenerlo en el sitio web del Parlamento ha desembocado en que, por extensión, la sombra de la duda se haya proyectado sobre los méritos académicos de los restantes diputados. El patinazo del líder popular en la Comunidad Autónomapopular dio lugar, por un lado, a que incluso desde las propias filas del PP se haya vacilado estos días sobre la licenciatura en Ciencias Políticas y de la Administración que el político palmero efectivamente cursó, tal como ha podido comprobar este diario, en la Universidad del País Vasco; y, por otro, a que una serie de parlamentarios decidiera a título individual presentar sus diplomas en la Cámara para que los compulsaran o se acreditara de alguna forma que lo que figura en la web institucional es cierto. Así lo hicieron desde la popular Lo mismo que están dispuestos a hacer desde ya todos los representantes de Podemos en la primera institución del Archipiélago -que únicamente aguardan a que el gobierno del Parlamento atienda su solicitud para fijar el modo de hacerlo- e hizo ayer mismo Astrid Pérez, por ejemplo. Sin embargo, el PSC-PSOE optó por sugerir a sus diputados que se abstuvieran de participar en el estriptisy a raíz del capítulo del inexistente Diploma de Estudios Avanzado (DEA) de Asier Antona, se ha producido casi de forma espontánea entre los parlamentarios que no tienen inconveniente en dar fe de que lo publicado en la web de la Cámara no está adulterado en modo alguno.
La decisión de los órganos del PSC-PSOE, confirmada a este diario por varios de los representantes del partido en la institución de la calle Teobaldo Power, chocó, sin embargo, con el anuncio de que los socialistas quieren imprimir mayor transparencia a la ley de altos cargos redactada por el Ejecutivo autonómico.
El anuncio de las enmiendas lo hacía el portavoz adjunto del grupo del PSC-PSOE en el Parlamento, Gustavo Matos, quien sí ha sido de los diputados que con más claridad y contundencia ha defendido estos días la necesidad de que se acrediten las titulaciones que se afirme poseer, pero este anuncio coincidía casi exactamente en el tiempo con el rechazo de su partido a que se transmita información sobre los títulos. Lo cierto es que no solo en el PSC-PSOE hay diputados recelosos de acreditar los títulos que ellos mismos dicen poseer -para ser parlamentario no es en absoluto indispensable contar con determinada titulación y la Cámara ni siquiera acredita que lo que los diputados publican en su web se ajuste a la realidad-, pero es igualmente cierto que fue justamente el PSC-PSOE el único partido que decidió ir un paso más allá y reclamar expresamente a los suyos no contribuir al estriptis informativo.
Sea como sea, representantes del PSC-PSOE como el mencionado Gustavo Matos o el propio Héctor Gómez, con responsabilidades en Ferraz como secretario de Relaciones Internacionales, no tuvieron inconveniente alguno en acreditar los currículums que publican en la web de la Cámara. Matos no solo es licenciado en Derecho, sino que cuenta también con un máster -entre otros méritos académicos- e incluso uno de sus trabajos de su etapa formativa fue publicado en una de las más prestigiosas revistas del ámbito de la responsabilidad civil. Gómez cuenta y acredita sus tres carreras: es diplomado en Turismo, licenciado en Ciencias del Trabajo y graduado en Derecho.
En el PP tampoco mostraron inconveniente alguno dos de las diputadas que cuentan con posgrados entre sus méritos académicos: Cristina Tavío, que al margen de licenciada en Derecho tiene un máster en Derecho Comunitario por la Universidad Libre de Bruselas -lo que, además, la obligó a examinarse en francés-, y Águeda Montelongo, que no solo es licenciada en Ciencias de la Actividad Física y Deporte sino que también cursó y obtuvo posteriormente el título del máster en Dirección y Gestión Deportiva, para lo que tuvo en su día que desplazarse a estudiar a la Universidad de Málaga. Montelongo llevará en los próximos días sus títulos al Parlamento. Tampoco otros diputados del PP, como Astrid Pérez, licenciada en Derecho por la Universidad de Granada -Derecho, Economía y Administración de Empresas son los estudios favoritos de sus señorías-, tienen problema alguno en acreditar la información de la web. Y lo mismo ocurre en casos como los de los representantes de Podemos Juan Márquez, licenciado en Música en los Países Bajos y con un posgrado en la prestigiosa Royal Academy of Music londinense, o María del Río Sánchez, que al margen de su licenciatura posee también un máster internacional en Rehabilitación del Patrimonio Edificado.
De hecho, ha sido precisamente Podemos el partido que ha trasladado a la Mesa de la Cámara una solicitud para que se pongan en práctica los "mecanismos" necesarios para que se acrediten los títulos que se afirma poseer en la web institucional, donde se da muchas veces el caso de que el apartado de la trayectoria política es mucho más amplio que el de la formación y actividad profesional. Se da la circunstancia de que el Parlamento aprobó una ley de transparencia que exige la acreditación de sus titulaciones a los altos cargos del Ejecutivo autonómico, pero, paradójicamente, esta exigencia no se la aplica a sí mismo en sus normas de transparencia. La Mesa tendrá ahora que responder a la solicitud de Podemos, que persigue que se compruebe la verdad de lo que consta en la web institucional de la Cámara.
Al margen de Podemos, ni la Agrupación Socialista Gomera ni Coalición Canaria tienen inconveniente alguno en que se acrediten los títulos, como tampoco diputados del PP y del PSC-PSOE, donde, no obstante, existen más resistencias, como de hecho puso ayer de manifiesto la directriz de los socialistas para no transmitir información sobre los méritos académicos. La idea compartida no es tanto que se obligue a informar de los estudios, habida cuenta de que esto no es necesario para ocupar escaño, como que la información sea veraz.
El secretario general de CC en Tenerife, Francisco Linares, ya avanzó ayer que coincide con la petición de Podemos y de diputados socialistas como Gustavo Matos. "Cuando un servidor público hace público su currículum debe certificar de una forma compulsada aquellos títulos que pone. Así se evitan comentarios como estos [por el caso de Asier Antona] que desacreditan totalmente a la vida pública", argumentó Linares en los micrófonos de la Ser, donde ahondó: "Yo siendo él [Antona] hubiera salido ya a aclarar de una forma clara y tácita, y si hay que pedir disculpas, hacerlo cuanto antes".
De momento, y según ha podido comprobar este diario, es la jefa de servicio de Personal, Documentación, Biblioteca y Archivo del Parlamento la que está compulsando los títulos y diplomas que los diputados están llevando a iniciativa propia a la institución.
