La comparsa Cubatao, del barrio de Jinámar, se alzó ayer con el primer premio de interpretación del concurso de comparsas infantiles de Los locos años 20, en el que participaron siete grupos. La formación, con su espectáculo Celebra la vida, se llevó también el segundo premio en la categoría de vestuario con la fantasía Alegría de Carnaval.

La comparsa, fundada en 2001 e integrada por 40 componentes, ya ganó en la edición de 2014.

La comparsa Kovadonga Junior, de Castillo del Romeral y fundada el pasado año, consiguió, por su parte, el primer galardón de vestuario en su primera presentación en el Carnaval con la fantasía Nadie dijo que era fácil, pero tampoco imposible.

El barrio de Jinámar, donde radica la comparsa Cubatao que preside Laura María Nordelo, estuvo de enhorabuena anoche ya que el grupo Lianceiros, ubicada también en la zona y dirigida por José Luis Armas, se llevó el segundo de interpretación y el tercero de vestuario con su espectáculo Ahora sí.

El tercer puesto en interpretación se fue para la Vega de San José de la mano de los 57 componentes de la comparsa Chiramay, que dirige Celeste Vargas, con su Volver a amanecer.

Se quedaron sin premio Estilo Junior, Brisa de Volcán y Yoruba, aunque dieron lo mejor de sí durante la actuación, parapetados con vistosos trajes al son de la salsa.

La cantera del Carnaval capitalino fue la encargada de inaugurar por primera vez en la historia de las fiestas el gran salón de Los locos años 20 del parque Santa Catalina, obra del diseñador Alberto Trujillo. Desde la primera actuación de los grupos, el escenario fue llenándose de plumas de los trajes de los menudos artistas al son de las coreografías.

Los pequeños deleitaron al público con su actuación y, aunque perdieron gorros de plumas o se les cayó los tirantes del pantalón, no dejaron de balancear sus cuerpos al son de los ritmos caribeños. Incluidos los más chiquitos, que también bailaron con soltura, aunque alguno se paró tímido ante el jurado que los evaluaba o brincó de alegría por verse en el pantallón que hay en el escenario y con el que el público de la grada sigue las actuaciones.

El parque Santa Catalina, que estaba casi al completo de gente a pesar del frío reinante, vibró desde el minuto cero con cada comparsa y animó con pitos, gritos y pancartas. A ninguna les faltó seguidores.

El espectáculo infantil, presentado por Nayra Collado, contó con la actuaciones de Kapikuas, Sing Starse y un grupo de la Escuela Artística de Silvia Barrea, que animó la fiesta antes de la decisión del jurado.