Reboso en el salón de baile de Los locos años 20. Eso es lo que aconteció ayer en el parque Santa Catalina y en el escenario Boulevar durante la celebración del Carnaval de Día de Las Palmas de Gran Canaria, que comenzó con un pasacalle desde Ripoche al epicentro del Carnaval con los protagonistas de la fiesta y continuó con un espectáculo de música en directo. Unas 8.000 personas, según la Policía Local, se dieron cita en el punto de encuentro para disfrutar de la música del grupo La Trova, la Orquesta Golosina, Los Lola y el Dj Tony Bob, encargados durante las cuatro horas de hacer disfrutar al más soso.
La fiesta comenzó al mediodía con un desfile que partió de la calle Ripoche en dirección al parque, y en el que participaron las candidatas a Reina del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, el grupo Chiara's Girls -ganadoras del concurso de disfraces en la categoría de grupo-, algunos de los candidatos a drag, varios grupos de batucadas y los personajes clásicos del Carnaval; entre otros.
En el parque Santa Catalina esperaba ya gente, principalmente familias, turistas y personas mayores con y sin mascarita. Tras el desfile llegó la música a cargo del grupo La Trova, encargado de abrir las cuatro horas de baile. Y bien que lo hizo con su repertorio musical y con temas de los años 60 y 80 para que todo el mundo pudiese participar sin complejos de edad en el evento. Tanto es así que lograron levantar hasta el público sentado en el graderío a menear el esqueleto.
Pasada la una y media, y sin que el grupo hubiese terminado su espectáculo, comenzaba la Orquesta Golosina a endulzar de merengue, bachata y salsa a los congregados en el escenario Boulevar -trasera del parque-, que también se iba llenando de mascaritas, algunas de ellas recién levantadas. Tras los Golosina, fue el turno del rock y el pop de la mano de Los Lola, que hizo las delicias de los más jóvenes.
Para los amantes del tecno, las mezclas y el reggae también hubo fiesta. El encargado de ello fue el Dj Tony Bob, pinchando sobre la carroza anunciadora del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, que aparcó en Luis Morote esquina con Eduardo Benot sin que hubiera acabado el espectáculo en el escenario Boulevar.
La música y la diversión continuaron pasada la hora del almuerzo, que no fue problema para nadie porque numerosas mascaritas aprovecharon los chiringuitos del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, que estaban abiertos, y los bares y locales de los alrededores de Santa Catalina para matar la gazuza que a esas horas ya comenzaba a hacerse notar.
El evento fue todo un éxito de público, tras la primera jornada de Día del pasado sábado, en la zona de Vegueta. Para los que no han podido disfrutar de ninguna de las dos fiestas hay una tercera oportunidad este sábado con el Carnaval al Sol de Las Palmas de Gran Canaria, que discurrirá entre el paseo de Las Canteras y la calle Luis Morote.
A muchas familias, el Carnaval de Día se les juntó con la Cabalgata Infantil, que comenzó a las cinco de la tarde desde el castillo de La Luz hasta Santa Catalina, donde les esperaba otra fiesta musical.
