Quizá a algunos de los asistentes del inicio del carnaval teldense les pudo extrañar la ausencia de fauna en el escenario preparado para albergar la vida selvática, ya que este fue el tema elegido a concurso por su público.
No es seguro si las largas paredes que constituían minuciosamente el espacio provisto para la escena del carnaval, construido en el área polivalente de Narea debido a las amenazas atmosféricas, sólo albergaban flora tropical por el miedo infinito que admitió sentir Roberto Herrera hacia los animales salvajes (y por los concejales del municipio) o sí en todo caso sería por la declaración de hace dos años en donde Telde se constituyó amiga de los animales rechazando la actuación de los circos caracterizados por el uso de animales como leones, cebras o elefantes. No, no hubieron animales en la selva que fue Telde, pero eso no impidió que el pregón se convirtiese en todo un éxito.
Redoble de tambores. ¿Se escucha el leiv motiv de Indiana Jones? "¡Bienvenidos a los carnavales!", gritó Herrera, conocido presentador de televisión y de eventos carnavalescos del resto de la Isla y Archipiélago, hacia los asistentes, que siguiendo la alegoría bien podrían presentarse como los exploradores que valientes buscan conocer los secretos de la jungla del carnaval de Telde.
Y así fue como de entrada un Herrera disfrazado se hizo presente en lo más profundo de la selva, entre ramas, hojas y lianas y captó la atención de miles de personas para dar el pistoletazo de salida.
Vestido como un auténtico aventurero con detalles en piel de guepardo, Roberto Herrera comenzó con fuerza y reiteró la importancia de la valentía, no sólo para enfrentarse a bestias, plantas venenosas u otras dificultades sino para enfrentarse a los propios sueños. Por ello, no desaprovechó la ocasión de impulsar a los teldenses a celebrar el carnaval. "¡El momento es ahora!", y añadió "aunque también lo será el próximo año electoral". La gracia y desparpajo del presentador, que admitió sentirse nervioso por dar comienzo a unas fiestas tan grandes ("yo ni siquiera invito a mucha gente a mi cumpleaños, y ahora estoy aquí presentando los carnavales de Telde"), cautivó a todos los presentes. También quiso insistir en que se recuperase el espíritu del carnaval con buenos disfraces. "Cúrrenselo, olviden los disfraces de tutú y los diademas", sermoneó sin pedantería y con ilusión por recuperar unas fiestas con calidad y sobre todo respetando y tolerando a los demás. "Esto es el carnaval. Esta es la jungla. Esta es mi jungla y la de ustedes, por lo que disfrutemos de lo maravilloso de estos días y hagamos nuestro esta fiestas tan maravillosa", concluyó el discurso, aunque no sin antes mencionar la importancia de apreciar todo el esfuerzo, trabajo y ganas que se había puesto en estas fiestas.
Tras el final del pregón, el escenario se llenó de música y alegría con las actuaciones de varias murgas del municipio; Los nietos de Sarymánchez y Las Golisnionas. Tras ellos, la comparsa infantil Los Diamantes volvieron a brillar en el carnaval de su municipio.
