Cuatro campañas en un movimiento que suena a presente y futuro. El Herbalife Gran Canaria está a punto de cerrar el fichaje de Marcus Eriksson, alero sueco de 2,01 metros y 23 años de edad (Uppsala, 1993) procedente del FC Barcelona. Una operación que se hará oficial en las próximas horas y que atará al exterior escandinavo por cuatro temporadas. Todo a falta de confirmación oficial.

Marcus Eriksson se desvinculó del FC Barcelona el pasado 30 de junio. El internacional sueco es otra víctima más de la limpieza que está haciendo Sito Alonso, nuevo entrenador blaugrana, con la intención de recomponer el club catalán. Eriksson llegó al Barcelona en 2011 procedente del Manresa, club al que llegó en edad junior. Un hecho que le ha valido para tener licencia JFL (jugador formado localmente). De ahí que Eriksson pinte como uno de los cupos fijos del Granca para el futuro. No obstante, el contrato de Eriksson también se guarda algunas cláusulas de salida en caso de que tenga opciones jugosas en el futuro.

El contrato de Marcus Eriksson será de cuatro temporadas, hasta 2020-2021. Un exterior más para el conjunto de Luis Casimiro, que ya cuenta con DJ Seeley, Shaq McKissic, Xavi Rabaseda y Oriol Paulí. Todo pendiente de lo que suceda con Sasu Salin, único jugador que el Granca inscribió en la lista de hombres sujetos al derecho de tanteo y que tiene una propuesta formal del Unicaja . La oferta que el Unicaja ha presentado por él es de dos años y el club claretiano estudia la posibilidad de igualarla. Un asunto que definirá en breve.

De hacerlo, la cuerda se rompería por el lado de Oriol Paulí, que ya aseguró que no descartaba nada para este verano.

Marcus Eriksson llegó al baloncesto español tras salir del KFUM Uppsala sueco. Continuó su formación en el Catalana Occident Manresa de la categoría júnior, pero ese mismo año ya debutó con el Assignnia Manresa en la Liga Ensea. Durante dos cursos, Eriksson jugó en el filial del conjunto azulgrana y en su segunda campaña debutó en el primer equipo.

Sin oportunidades en la ACB, el alero salió del Barça cedido para ir al lugar donde empezó todo: Manresa. Ése fue su mejor año deportivo con diferencia. El sueco asumió galones y consiguió ser uno de los hombres importantes del cuadro catalán. Tanto que alcanzó el honor de ser incluido en el mejor quinteto joven de la Liga Endesa del curso 2013-2014. En parte, gracias a sus 11.2 puntos de media por encuentro (con un 37.5 % de acierto desde la línea de tres).

Años complicados

Aquel gran curso con el Manresa le valió el regreso al Barça. Una vuelta que sólo duró un partido. Porque en el último periodo del primer partido de la Liga Endesa ante el Baskonia su rodilla se quebró. Su diagnóstico: ligamento cruzado anterior y menisco externo de la rodilla completamente roto. La temporada 2014-2015 estuvo en blanco.

Seleccionado ese mismo verano por Atlanta Hawks en la posición 50 del Draft de la NBA, Eriksson volvió a jugar para promediar 3.4 puntos y 1.1 rebotes en 22 partidos. Este último año sus números son 6.7 puntos y 1.6 rebotes en 15 minutos en pista durante 30 partidos en la Liga Endesa. Su porcentaje de acierto en triples se quedó en el 44.7% de acierto. En Euroliga sus minutos se redujeron y sus estadísticas bajaron a los 1.8 puntos y 1.2 rebotes en apenas 9.6 minutos de media por partido. Ahora el Herbalife Gran Canaria aparece en el camino de Eriksson como un lugar donde explotar.