El Herbalife Gran Canaria altera este domingo su rutina de entrenamientos de pretemporada. Y es que el equipo claretiano disputa una sesión a puerta cerrada frente al Ratipharm Ulm alemán, una cita que ya empieza a ser un clásico veraniego sin oportunidad para que lo presencien aficionados y medios de comunicación.

Luis Casimiro podrá apreciar la evolución de los suyos, que de momento solo han disputado un encuentro que se saldó con derrota frente al Iberostar Tenerife. La siguiente cita, a puerta abierta, el martes en Puertollano ante el Alba Berlín.