Señala que la Comisión Europea presentó ayer una propuesta sobre las oportunidades de pesca en 2009 y 2010 para determinadas especies de profundidad, en las que se incluyen varias especies de tiburón.

Añade que la Comisión propuso a largo plazo la adopción de un total admisible de capturas (TAC) de cero toneladas para tiburones de profundidad.

Según Oceana esta decisión llega con un año de retraso respecto al compromiso adoptado en 2006 y en contra el consejo científico que recomienda "el cese inmediato" de la captura de estas especies.

Advierte de que si el Consejo de Ministros de Pesca de la UE, en su reunión mensual en noviembre, apoya esta propuesta, "la pesca destructiva" de tiburones de profundidad y otras especies como el pez reloj continuará un año más.

El director de investigación y proyectos de Oceana para Europa, Ricardo Aguilar, considera que "estos stocks pesqueros son extremadamente vulnerables y están agotados", de forma que una reducción de las capturas no basta para frenar su rápido declive.

Hace hincapié en que hace cuatro años que los científicos aconsejaron el cierre completo de estas pesquerías, y de hecho, se trata de la única medida adecuada que puede adoptarse para la conservación de estas especies amenazadas.

Oceana valora la propuesta de un TAC de cero toneladas para estas especies en 2010, pero reitera que se trata de una medida urgente que ha de ser adoptada de forma inmediata para la campaña de pesca de 2009.

Resalta que los tiburones de profundidad (aquellos cuyo hábitat se encuentra por debajo de los 300 metros) están entre las especies de tiburones con tasas de fecundidad más bajas y, por lo tanto con puestas muy reducidas, lo que hace que sean muy susceptibles de ser sobrepescados.

También apunta a que los tiburones no son las únicas especies contenidas en esta propuesta, ya que en el mismo texto se incluyen otras especies de profundidad como el pez reloj, el granadero, la maruca azul, o el sable negro.

Recuerda que estas especies se caracterizan por su elevada longevidad (más de 100 años en algunos casos) y por sus lentas tasas de crecimiento, y por ello estas pesquerías sólo pueden admitir niveles muy bajos de explotación.

El consejo científico recomienda que no haya pesquerías dirigidas al pez reloj, y reducciones de hasta un 50% con respecto a los niveles iniciales de explotación para algunas especies, entre otras restricciones.