"VIP", la segunda producción del director guatemalteco Elías Jiménez Trachtenberg, retrata la vida de un corrupto político caído en desgracia y a quienes sus antiguos aliados le dan la espalda al ingresar en prisión para pagar por sus desmanes.
El filme será estrenado el jueves en las salas locales.
La cinta, explicó Jiménez a Efe, tiene "la intención de mostrar las realidades y problemas que afectan a la sociedad en su conjunto", principalmente "en lo relacionado con los sistemas de justicia y penitenciario, que pasan por su peor época".
Convencer a las autoridades del Sistema Penitenciario y a los reos del Centro de Detención Preventiva para Varones de la capital guatemalteca para filmar la película en el interior de ese lugar costó a los productores más de un año de esfuerzos.
Lo más fácil, indicó el director, fue lograr el apoyo de las autoridades, que "nos dieron ayuda y seguridad durante la filmación", pero lo más difícil fue ganarse la confianza de los reos que se negaban a que se diera a conocer la realidad de la cárcel.
"Estuvimos a punto de abandonar el proyecto, porque sin la autorización de los reos no podíamos hacer nada", recordó.
Todo cambió cuando, como si se tratara de palabras mágicas, Jiménez, en un último esfuerzo, habló con el que entonces era el principal líder de los reos de esa prisión, a quien dijo: "Esta será la primera vez que te vas a ver como artista y no como asesino (...) te mirarás en los medios como alguien que está haciendo algo bueno".
A partir de entonces, agregó, "la película se convirtió -durante los dos meses que duró la filmación- en parte de la cotidianeidad de la cárcel".
Juan Pablo Olyslager, protagonista y productor ejecutivo de la cinta, aseguró que a diferencia de otras películas que también abordan la situación de las prisiones, como la brasileña "Carandiru", del director Héctor Babenco (Brasil, 2003), "VIP: La otra casa" fue hecha "dentro de una cárcel real, en uso, y los actores y extras son presos de verdad".
"La cárcel de Carandiru estaba vacía. Todos los que aparecen en esa película son actores. En la nuestra todo es real: las localizaciones, los actores, los extras", precisó.
Más que una virtud de la cinta, por el dramatismo y la realidad que proyecta, agrega Jiménez, haber filmado en una cárcel con reos reales -con los peligros que ello implica- fue una necesidad, por falta de recursos económicos.
"No nos corrimos el riesgo por el simple hecho de haberlo querido. Si hubiéramos tenido medio millón de dólares no lo corremos. Hubiéramos construido una cárcel y contratado extras. Pero en países como el nuestro, tercermundista, donde no tenemos industria cinematográfica ni apoyo de gobiernos ni de empresas, lo que nos queda es recurrir a la realidad", anotó Jiménez.
La cinta tuvo un coste de 75.000 dólares, que fueron aportados por organismos de cooperación internacional.
"VIP: La otra casa" es la tercera producción de Casa Comal, una organización no gubernamental dedicada a construir una industria audiovisual y cinematográfica en la región centroamericana, y creadora del Festival Ícaro, una muestra anual de las mejores producción hechas en el istmo.
El primer largometraje de Casa Comal fue "La casa de enfrente" (Guatemala, 2003), y el segundo, "Las Cruces, Poblado Próximo" (Guatemala, 2004), el primero dirigido por Jiménez, y el segundo por el también guatemalteco Rafael Rosal.
"Las Cruces, Poblado Próximo", una historia basada en hechos reales, que cuenta las penurias sufridas por los guatemaltecos durante la guerra interna de 36 años que vivió este país (1960-1996), ha sido galardonada con seis premios internacionales, entre ellos el de "Pobreza Zero" otorgado este año en el Festival de Cine Pobre de Cuba.
