Basado en una novela de Ian McEwan, este film espera ser el más nombrado en la deslucida conferencia de prensa que el domingo dé a conocer los ganadores de los prestigiosos premios, ya que cuenta con el mayor número de candidaturas de este año, entre las que destacan las de mejor película, dirección, guión adaptado e interpretación para sus protagonistas.

La huelga de guionistas de cine y televisión que comenzó el pasado 5 de noviembre para pedir mejoras económicas ha dado al traste con la glamourosa cena prevista para entregar esos dorados galardones y que iba a ser retransmitida en directo por la cadena de televisión NBC, con asistencia de las grandes estrellas de Hollywood.

En su lugar habrá una conferencia de prensa en la que simplemente se va a anunciar quienes son los premiados.

Los británicos James McAvoy y Keira Knightley son los protagonistas de la historia de amor, celos y redención que cuenta "Atonement" y que ha convencido este año al público británico hasta convertirse en una auténtica sensación en el Reino Unido.

Estos actores se juegan el reconocimiento de la Asociación de Prensa Extranjera junto a competidores del calibre de George Clooney, Daniel Day-Lewis, Denzel Washington o Viggo Mortensen, en el caso de McAvoy, y de Cate Blanchett, Jodie Foster o Angelina Jolie, en el de Knightley.

"Atonement", dirigida por Wright, quien debutara en el cine en 2005 con "Orgullo y Prejuicio", también opta al premio a la mejor actriz de reparto (Saoirse Ronan) y al de composición musical, pero deberá enfrentarse a otros pesos pesados del año como "Charlie Wilson's War", protagonizada por Tom Hanks y Julia Roberts -ambos candidatos-, o la aclamada y violenta "No country for old men" de los hermanos Ethan y Joel Coen.

Esta cinta, concebida como un "western" actual opta a cuatro premios de los importantes, a mejor película dramática, mejor dirección y mejor guión, además del de mejor actor de reparto por la actuación de Javier Bardem como un sangriento asesino.

Se trata la tercera oportunidad que el español tiene de llevarse un Globo de Oro a casa, después de haber sido candidato, primero, en 2001 por "Antes que anochezca" y, después, en 2005, por su interpretación del tetrapléjico Ramón Sampedro en "Mar adentro" de Alejandro Amenábar.

Si se cumple el dicho de que a la tercera va la vencida, tal y como augura buena parte de la crítica estadounidense, Bardem podría alzarse con un premio para el que no habrá fiesta en Los Ángeles, pero que relanzaría una nueva candidatura a los Oscar.

Otro de los nombres españoles que podrían sonar como ganadores es el del reconocido compositor vasco Alberto Iglesias, quien opta al premio a mejor banda sonora por la música del filme "The kite runner".

La nueva aventura del sin par Tim Burton, "Sweeney Todd", que, protagonizada por el también nominado Johnny Depp, relata la historia de un barbero injustamente condenado a prisión en el exilio que vuelve a Londres con una nueva identidad y jurando venganza, también puede llevarse algún reconocimiento.

El film de Ridley Scott "American Gangster", con Russell Crowe y Denzel Washington, y la nueva obra de Paul Thomas Anderson "There will be blood", con el británico Daniel Day-Lewis a la cabeza del cartel, podrían deparar también alguna sorpresa en la conferencia de prensa que mañana dará a conocer a los ganadores.

La nota musical y de color la pueden poner "Hairspray", la adaptación de la célebre y sesentera obra de Broadway, "Across the universe", el musical realizado con las canciones de los Beatles, y la producción del canadiense Jason Reitman, "Juno", que, con la historia de una joven de 16 años de Minesota que se queda embarazada, se ha ganado el beneplácito de crítica y público.

En el apartado televisivo la lucha se concentra entre los éxitos internacionales de "Anatomía de Grey", "House" y "Damages", y la serie sobre la dinastía de los Tudor que el canal Showtime realizó con el irlandés Jonathan Rhys Meyers como Enrique VIII.

Nombres tan conocidos como Sally Field, Glenn Close, Minnie Driver o Holly Hunter se disputan el premio a la mejor interpretación dramática en la pequeña pantalla, donde, en el apartado masculino y de comedia, también destaca la pugna entre el ganador de un Oscar Steve Carell, Alec Baldwin y David Duchovny.