La celebración del concierto de fin de curso de los alumnos de Composición del Conservatorio Superior de Música de Canarias (CSMC), anoche en el auditorio Alfredo Kraus, protagonizado por músicos de la institución académica, se convirtió en un acto de protesta en contra de la pérdida de especialidades a impartir el próximo curso, como consecuencia de los criterios con que la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes regulará la implantación de los estudios oficiales de grado en música.

Un acto con el que profesores y alumnos quisieron visibilizar su malestar y rechazo a una normativa que "nos sitúa al borde de la desaparición", tal como se ha expresado el claustro y la asamblea de profesores en un manifiesto que anoche fue entregado a los asistentes.

Con el mensaje de "músicos canarios en peligro de extinción", unos 34 alumnos de las dos sedes del Conservatorio Superior, 11 jóvenes compositores con la colaboración de 23 intérpretes, celebraron anoche el concierto de fin de curso. Una convocatoria que en su cuarta edición en colaboración con la Fundación Auditorio, produjo "cierta tristeza porque es un evento muy importante para nosotros y a día de hoy no sabemos lo que ocurrirá el próximo año", explicaba anoche Daniel Roca, jefe del Departamento de Composición del CSMC.

"Banco de pruebas"

El concierto, que tradicionalmente supone "un banco de pruebas" para compositores e intérpretes, no tuvo el carácter festivo de años anteriores. "Desgraciadamente hoy tiene un carácter gris, casi negro, por la situación que estamos viviendo", exclamó Roca ante el público al inicio del concierto antes de resumir las reivindicaciones del claustro expuestas en el manifiesto aprobado el 25 de abril. La elaboración de una nueva orden que regule la implantación de los títulos de grado, la restitución de las especialidades de Musicología y Dirección y las de arpa, clave, acordeón y órgano, así como que se impartan Composición y Pedagogía en las dos sedes, o al menos de forma alterna "como mal menor", son las demandas que no han encontrado respuesta en Educación.

Repertorio

El programa escogido para este concierto de fin curso que el Auditorio presentaba en el marco del Ciclo de Jóvenes Intérpretes, tenía en su primera parte obras como Ariana, de David Dahoruch, interpretada al piano por Javier Santana; Brief B, de Jacinto Valido, con Erik Rodríguez al bombardino; Obstinando, de Juan Pedro León, con José Mª Curbelo al piano; 3 canciones, de Tania Rodríguez, ejecutadas por la cantante Esther Suárez y la propia compositora al piano; La traición de Asóka, de Nauzet Pérez, con Nerea Samino, Laksmi Camacho y Pablo López, clarinete; e Introducción y danza al sol invicto, de Rubens Askenar García, con Priscila González y Eva González, al clarinete, en la primera parte.

En la segunda parte de la audición, se pudieron descubrir piezas como Firefly, de Carlos González, con Melba Artiles al piano; Misterio y encuentro de dos, de Aga Umpiérrez, ejecutada a las guitarras de Hugo Hernández y Gonzalo Macías a las guitarras; una pieza de Odette Machado con Texenén Déniz a la flauta, Aurora Cano a la viola y Tania Rodríguez al piano; Pancha maja bhuta, de Cristina Quintana, con Laksmi Camacho y Pablo López al clarinete y Leandro Ojeda al contrabajo; y Octubre 12 AM, de Filiberto Díaz, interpretada por Texenén Déniz a la flauta, Alejandro Piñeiro al violín, Aurora Cano a la viola, y Tania Cantallops, al chelo.