Miguel Abellán, herido en la boca este sábado en Las Ventas, por lo que ha tenido que recibir "unos treinta puntos", se encuentra "bien", aunque con calmantes que alivien el fuerte dolor, y por su cabeza sólo pasa "volver a torear la semana que viene", informó este domingo a EFE el doctor Máximo García Padrós.

"Está bastante fastidiado -señaló Padrós-, algo normal, pues la cornada en la zona de la boca es muy dolorosa. Tiene la parte de la cara bastante inflamada por el fuerte golpe, que ha afectado también a nervios, y, aunque está con analgésicos muy fuertes, de momento hay que ser cautos desde el punto de vista médico, aunque él ya está pensando en el toro".

Abellán, ingresado en la Clínica de la Fraternidad de Madrid, está a la espera de que remita en parte la inflamación para ser sometido a un escáner en el macizo maxilofacial, ya que también perdió varias piezas dentales, y aún hay que valorar más en profundidad esos daños para una posterior reconstrucción.

Pero a pesar del dolor que padece, lo que más la fastidió fue "no poder cumplimentar su actuación en Las Ventas, cosas de toreros", apostilló Padrós.

Miguel Abellán resultó herido en la boca al recibir un pitonazo cuando entraba a matar a su primer toro en la corrida de este sábado en Las Ventas. Un derrote seco que le abrió una herida profunda y amplia desde la comisura derecha del labio inferior hasta la zona del maxilar.

El torero madrileño, que sangraba abundantemente, fue recogido del suelo, tras el quite de la cuadrillas, para ser llevado a la enfermería, donde le intervino el equipo médico de García Padrós.

El parte médico señala que el diestro sufrió una "herida contusa en el labio inferior, que le causó destrozos en el músculo orbicular, con avulsión de piezas dentarias, y ligera conmoción cerebral", de pronóstico reservado.