El escritor Paul Goeken, afincado en Maspalomas, quiso prolongar más allá de su muerte el juego literario. Días después de fallecer en su casa del Sur de Gran Canaria, los periódicos holandeses dan a conocer que el autor de La travesía (Alba Editorial, 2009) también es allí Suzanne Vermeer, autor de Cruise, entre otras obras.
Según el digital Volkskrant, "el escritor trabajó bajo el seudónimo de Susan Vermeer. Fue uno de los escritores de thriller más exitosos de los últimos tiempos. Bajo el nombre de Suzanne Vermeer escribió títulos como Cruise". La información añade: "Goeken también ha publicado cinco novelas de suspense bajo su propio nombre. En uno de los libros se le ocurrió una dirección diferente, por lo que el editor decidió usar un seudónimo". Bella Italia, el último thriller firmado con su seudónimo, se encuentra a la venta desde principios de junio y actualmente está en el segundo de la lista de best seller holandés, según recoge De Papieren Man. La publicación de Hans Cottyn añade: "Luces del Norte, el nuevo thriller, se prevé para principios de la primavera de 2012".
Como Goeke, escritor establecido en Maspalomas, casado y con tres hijos, su carrera literaria arrancó con Hammerhead (2002), a la que seguirían varias entregas protagonizadas por los detectives Alfonso Silva y Carmen Marrero. Son Camouflage (La traición de Córdoba en español, 2004), De orde (La secta, 2006), Spaanse furie (Furia española, 2007), y la ya citada La travesía, que trata del fenómeno de las pateras y cayucos que salen desde África hacia Canarias desde el punto de los inmigrantes.
La obra de Goeken está intensamente vinculada a las Islas Canarias. En La traición de Córdoba, editada por Robinbook, se adentra en el mundo del terrorismo islámico, pero en el contexto del Sur de Gran Canaria, su lugar de residencia. En otros casos, son temáticas vinculadas a España y a su proceso político, como ocurre con La orden (que fue best-seller en Holanda), donde el autor analiza el comportamiento de los miembros de una secta que quiere devolver España a la etapa franquista.
Suzanne Vermeer, en Holanda, tal como se ha divulgado tras su fallecimiento por un cáncer, siempre se quejó del interés masivo de los lectores españoles por los mismos temas. Entre ellos, destacaba "la obsesión por los libros de la guerra civil, la república y el mismo franquismo. Es como un trauma", añadía, "del que no se sale, y hace falta algo más de luminosidad en las librerías de este país".
En tono crítico, Vermeer- Goeken destacaba: "Sin ir más lejos, hace unos días me acerqué a la sección de libros de unos grandes almacenes y me quedé sorprendido de cómo la mayoría de los libros trataban sobre estos temas. En general, eran libros con portadas en blanco y negro, faltaba algo de luminosidad en esta sección",
