Bruce Springsteen estará en Las Palmas de Gran Canaria el 15 de mayo y ese será uno de los conciertos en España durante su gira europea de primavera. "Es una noticia espectacular", según coincidieron en resaltar ayer en Fitur, en Madrid la totalidad de los responsables institucionales que participaron en la presentación del evento. En el marco de la feria turística, el promotor del concierto del músico norteamericano en la capital grancanaria, Leopoldo Mansito, explicó que las entradas saldrán a la venta el próximo 1 de febrero, que se habilitará un total de 46.000 localidades en el Estadio de Gran Canaria, y que habrá dos precios, uno de 60 euros para las sillas que se instalarán en el césped, y otro de 70 euros para la grada numerada.

El promotor calificó de "aventura muy bonita" la producción en la que se ha embarcado y que se trata de "un sueño largamente trabajado durante muchos meses". "Ahora ya podemos gritar a los cuatro vientos que El Boss estará en Las Palmas de Gran Canaria y que este será uno de los únicos cincos conciertos que dará en España junto a los de Madrid, Barcelona, San Sebastián y Sevilla", explicó el promotor.

Las previsiones son que, al igual que en las demás plazas europeas y españolas en las que ya se han sacado las entradas a la venta, se agoten en muy poco tiempo, aunque se aseguró que esperan la llegada de miles de seguidores de el Boss no sólo de toda Canarias, sino también de la Península y del resto del mundo. "Este concierto es un gran atractivo para Las Palmas de Gran Canaria y demostrará que la capital puede acoger este tipo de eventos como cualquier otra gran ciudad española y europea", presumió el concejal de Turismo del Ayuntamiento capitalino, Pablo Barbero. El presidente del Cabildo grancanario , José Miguel Bravo de Laguna, afirmó que dada la gran relevancia del evento, se quiso presentar en el marco de Fitur para resaltarlo como uno de los grandes acontecimientos de los últimos tiempos en la Isla. Según sus cálculos, de cubrirse las 46.000 localidades, el concierto se convertiría posiblemente "en el acto de espectáculo público de mayor asistencia de toda la historia de Canarias".

Bravo recordó que se trata de una iniciativa privada "a la que le deseo el mayor éxito", y aseguró que el Cabildo "apoyará de manera limitada" dada la situación de las arcas de la corporación, "de manera que se puedan conciliar los intereses públicos y los intereses privados". Afirmó que el Cabildo cederá el recinto donde tendrá lugar el concierto y dio por segura la presencia de muchos aficionados procedentes de todas las islas.

En este sentido, Leopoldo Mansito, el promotor, consideró que el concierto "va a producir una gran cantidad de ingresos" para los negocios locales e instó a que algunas de las instituciones las cuantificara para disponer de esa información de cara al futuro. "Qué Dios nos coja confesados", soltó el productor del evento visiblemente eufórico por lo que para su empresa supone el logro de llevar a Las Palmas de Gran Canaria a uno de los grandes iconos internacionales de la música pop y de la historia del rock.

El viceconsejero de Turismo de Canarias, Ricardo Fernández de la Puente, dijo que se trataba de una "magnífica noticia" y auguró un gran éxito al señalar que las entradas "se agotarán en media hora". De la Puente no concretó si el Gobierno de Canarias aportará algún tipo de apoyo al concierto.