El Museo Canario no encuentra comprador interesado en adquirir vía subasta público un edificio de su propiedad, situado en la esquina de las calles San Bernardo y Viera y Clavijo. El edificio con un precio de salida de 3,8 millones de euros, según la tasación oficial realizada a tal efecto, agotó el pasado viernes el plazo para recepción de ofertas, sin hasta la fecha ninguna persona física o jurídica se haya mostrada predispuesta a hacerse con la propiedad.

La dirección de El Museo Canario mostraba ayer su confianza en poder formalizar esta operación inmobiliaria, cuyos ingresos irían destinados a financiar el proyecto de ampliación de la sociedad científica, en curso en la actualidad. "La casa sigue a la venta e intentaremos venderla de forma directa y de las propuestas que nos lleguen estudiaremos hasta donde podremos llegar. Lo que no vamos a hacer es malvender la casa", explicaba ayer Diego López, gerente de El Museo Canario. López lamentó que en la subasta nadie se hubiera interesado, hecho que atribuyó a que "nos ha tocado un mal momento y desde luego vista la situación y nuestras necesidades estaremos abiertos a cualquier oferta".

Las necesidades no son otras que la delicada situación económica que atraviesa la institución, y la urgencia en lograr fondos para completar la segunda fase de la ampliación. La primera fase se pudo completar con las aportaciones económicas del Gobierno y Cabildo, quienes han transferido tres millones de euros cada uno. El Ayuntamiento no ha satisfecho lo que se comprometió en 2006 ni lo hará.