- Esta es su primera exposición tras 22 años de práctica pictórica. ¿Era, tal vez, una experiencia por la que ya tocaba pasar?

- Estoy muy agradecida a la galería por la oportunidad. La verdad es que nunca antes había expuesto, porque no me sentía del todo a gusto, dado que no me veía del todo reflejada en mis obras. Ahora tengo más tiempo para mi faceta artística y estoy más tranquila, dedico menos momentos a la familia.

- Al comienzo de la exposición mencionó que le gusta que sus cuadros sean elementos artísticos que den color a cualquier casa, ¿cree que lo ha conseguido, ahora que se clausura?

- Ha tenido buena acogida y ha gustado mucho. Doña Paloma Herrero [crítica de arte] hizo un escrito sobre mi obra. Es una época mala y no todos pueden vender arte, pero me importaba más exponer. Pienso que es el principio, que es el primer paso para seguir.

- Entonces, ¿piensa en organizar más exposiciones en el futuro?

- Sí, la experiencia me ha gustado y espero repetir. Estoy mirando otras galerías. Tengo cuatro series para hacer varias muestras: una es de pinturas marinas y otra representa frutas en la naturaleza. Además tengo una de instrumentos musicales, entre 12 lienzos bien grandes, y 20 dibujos en papel, siempre óleos y acrílicos, mi técnica principal.

- A estas alturas cabría incluso plantearse una antología.

- De hecho, una de las series posibles es una retrospectiva de obras hechas desde que empecé, entre 1990 y 1991. Hay que tener una base, esa época es el comienzo y la serie retrospectiva la refleja muy bien. Si hoy soy totalmente abstracta, de muchas pinceladas, entonces pintaba estilo figurativo, esa serie se compone de cuadros más concretos.

- Esa pasión por la abstracción, ¿en que se basa?

- Al principio empecé con la figuración como punto de partida, pero es un estilo que no me atrae. No me gusta copiar y reflejar una realidad tal cual, me llama más crearla yo. Ese proceso de transformación es mágico: primero te tienes que enfrentar al lienzo en blanco. Luego te surgen ideas y te salen los trazos, es algo que me encanta, el crear.

- Una de sus premisas es la de abrir la interpretación al criterio del público. ¿Qué respuestas ha obtenido con sus cuadros en la muestra?

- La mayoría han sido comentarios buenos hacia mis cuadros, como ya he dicho. La anécdota más curiosa me ocurrió con un señor que me preguntó por qué escondía la tristeza de la mujer en la obra. Le pedí que se explicara y me mostró los rostros tristes de varias mujeres, ocultos entre las pinceladas que componen las fachadas de unos caseríos pero que él adivinó con claridad. Me sorprendió, ni yo misma había caído. He decidido ceder este cuadro al Club.