Internet ha impulsado la creación de un nuevo tipo de crítica de cine en la que el artículo puede venir acompañada de más recursos que la embellezcan como imágenes y sonidos. Esa fue una de las conclusiones a la que llegaron los cinco críticos que analizaron ayer el sentido de la crónica cinematográfica en un debate que formará parte del rodaje del documental del realizador Octavio Guerra En busca del Oscar sobre la figura del periodista argentino y presidente de la Asociación Española de la Prensa Cinematográfica, Oscar Peyrou.

Además del propio Peyrou, en el debate participaron el crítico y presidente del jurado del 15º Festival, Quintín; el programador del Festival de Sevilla, Alejandro Díaz Castaño; el ex director del Festival de Cine, Claudio Utrera y el director del programa El Séptimo Vicio de RNE 3, Javier Tolentino. Todos reflexionaron sobre la diferencia entre el ayer y hoy de la crítica. El coloquio fue moderado por el periodista Antonio Weinrichter.

Javier Tolentino recordó que algunos medios escritos no tienen la libertad que tiene Internet, ya que ahora puedes acompañar a la crítica de con bandas sonoras, escenas y realizar una crónica maravillosa. "Hay un antes y un después por los recursos que te ofrecen, otra forma de desarrollarse la crítica". Quintín, por su parte, reconoció que ahora la gente que hace crítica pasa antes por la Academia y tiene una formación mayor. "El eje es la sabiduría cinematográfica", aclaró. "Pero las películas a veces ya vienen con su propia crítica ya que hay una homogeneidad en donde no se rompe lo previsible. Aunque el tiempo ha demostrado que no hay ninguna diferencia entre colgar una crítica en un periódico que en un medio digital". Claudio Utrera subrayó que siempre ha concebido la crítica como un simple ejercicio literario. "Hago un esfuerzo por escribir lo más claro y bello posible", dijo, "y que sirva para persuadir al lector si debe o no debe ir a verla. Empecé hace 40 años como un género literario cercano al ensayo".

Preyrou recordó unos experimentos en los años 90 en donde se les pedía a unos estudiantes que resumieran unas películas sin verlas sólo observando los carteles. "Los directores concluyeron que se habían dicho cosas justas, por lo que no era necesaria verlas", señaló. Y recordó que "muchos medios dependen de grupos empresariales con productoras internas que no les interesan que critiquen a sus películas". Preyrou también añadió un experimento en el Festival de Cannes en donde se hicieron críticas sin que se vieran las películas, usando recursos típicos. Alejandro Díaz recordó que cuando comenzó con su blog de cine el planteamiento del equipo era proponer temas y currarse dossiers de directores de cine. "Escribíamos porque nos apasionaba el cine, y llega más en Internet que en papel".