La nueva apuesta del Festival de Cine de Las Palmas se llama Alex Ross Perry (Pensilvania, 1984) y esta 15º edición descubre por primera vez su breve, aunque intensa, trayectoria con una retrospectiva de tres de los cuatro títulos que componen su filmografía. Mientras su nombre despunta en el escenario del mejor cine independiente estadounidense, el trabajo de Ross Perry permanecía inédito en España hasta ahora. El empeño del director del certamen, Luis Miranda, hace posible que esté presente en el país. El público podrá visionar hasta mañana viernes Impolex (2008), The colour of the wheel (2011) y Listen up, Philip (2014), esta última premiada en el Festival de Sundance, toda vez que su última película, Queens of Earth (2015), es tan reciente que aún no circulan copias.

Los conflictos de pareja, el miedo a la soledad, la neurosis y la vida urbanita en las arterias de Nueva York constituyen los temas comunes a una filmografía cuyo nexo principal es que "retrata a los personajes en el peor momento de sus vidas". "Todos mis personajes atraviesan una etapa de transición", afirmó ayer el cineasta de forma sucinta al interrogarle sobre su cine. "Por eso, mis películas tienen mucho diálogo y utilizo siempre el humor como contrapunto, como canal de desahogo", señala.

El empleo riguroso de un guión lo descabalga del subgénero del mumblecore, basado en la improvisación, y lo aproxima a la vertiente más dramática de Woody Allen, con diálogos personales trufados de ironía y referencias literarias y fílmicas. "Me gusta jugar con las conexiones que invento entre el cine y la literatura", admite. Otro rasgo de identidad en el cine de Ross Perry es la casi extinta filmación en 16 milímetros, que, en palabras del cineasta, "proporciona esa textura antigua, pero real y menos artificiosa, que da forma a las películas".

Con todo, la crítica estadounidense destaca su "sobresaliente dirección de actores". "Mi secreto es que cuento siempre con el mismo equipo de rodaje y de intérpretes, y eso me ayuda a crear un espacio cómodo y cómplice desde el principio", revela. Su actriz fetiche es Elizabeth Moss, protagonista de Listen up, Philip y conocida por su papel como Peggy Olson en Mad Men.