El artista vasco Agustín Ibarrola hará de la Villa de Garafía, en la isla de La Palma, un museo "único en el mundo". La confirmación llegó ayer de la mano del también artista palmero Facundo Fierro. Tras meses de incertidumbre y polémica, ya se han puesto de acuerdo los responsables municipales, vecinos y las plataformas que en su día recogieron firmas para evitar que el autor del Bosque de Oma (Cortézubi, Vizcaya) llevara a cabo en la Isla lo que muchos calificaron de "un nuevo Tindaya".

Esta misma semana Ibarrola presentó un encinar de piedras pintadas en Valle de Amblés, en Ávila. Allí se refugió el creador, que tuvo que vivir escoltado durante más de una década debido a su militancia antiterrorista, a lo largo de varios veranos. Pese a la importancia de esta presentación, y según Fierro, "todo el mundo hablaba ya de lo que Ibarrola tiene previsto hacer en La Palma, hay un interés por todo el país que ha llegado incluso hasta Alemania".

Los temores de los palmeros comenzaron en abril de este mismo año. Fue entonces cuando el Cabildo de La Palma anunció la inauguración de una muestra que serviría de introducción para un proyecto posterior en el barranco de La Luz denominado Museo Naturaleza // Arte. Las críticas se centraron entonces en la posibilidad de que el autor pintara en zonas con especial interés medioambiental. Coalición Canarias (CC), liderada por el ahora alcalde de la localidad, Martín Taño, fue una de las fuerzas que -junto a Nueva Canarias (NC)- alzó su voz contra esa posibilidad.

El cabildo palmero, por su parte, confirmó ayer que se ha abordado el expediente junto con el ayuntamiento garafiano. Pese a que sus portavoces indicaron que quizá es "demasiado pronto" para dar por segura la intervención del ganador de la Medalla del Mérito de Bellas Artes en la localidad, sí que reconoció un cambio de postura al respecto por parte de las autoridades municipales.

Fierro, coordinador de la idea junto a su amigo y colega vasco, adelantó sin embargo que el artista ya trabaja en la intervención desde su estudio en la península y que en breve viajará a la Isla para continuar con la obra. Adelantó, asimismo, que espera que la intervención pueda ser presentada durante la próxima primavera. "Lo cierto es que debió haber estado lista este verano pero se retrasó por varios motivos. Hubo unas elecciones y luego la constitución de los nuevos gobiernos", aseguró. Respecto a la polémica, Fierro señaló directamente hacia la "desinformación" como principal causa de esa repulsa inicial. "Es falso que se vaya a pintar árboles o barrancos", apostilló.

De hecho, el propio Fierro ha realizado varias visitas con miembros de la corporación municipal y ha acudido a reuniones explicativas "con las plataformas que manifestaron sus dudas".

Fierro aclaró que la idea de Ibarrola para Garafía "se basa en unos códigos que reinterpretarán la naturaleza la de la localidad. El visitante, con una guía, será testigo de la obra desde el mismo momento que entre en el municipio. Ibarrola nos enseñará a ver cómo un relieve puede ser una escultura o una pared se convierte en un friso". Porque, continuó, "lo que se va a hacer en Garafía no tiene nada que ver con ninguna de sus anteriores obras".

Con todo, y después de las reticencias iniciales, Ibarrola va a dejar su sello artístico en La Palma. "Durante las visitas que hemos hecho con los responsables locales muchos se han dado cuenta de que se puede ver la naturaleza de su entorno de una manera totalmente distinta, va a ser todo un acontecimiento", concluyó Facundo Fierro.