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Noguera: "Mi humor es muy autorreferencial, se ríe de sí mismo"

El artista abre la temporada de la Sala Insular de Teatro con 'Ultrashow'

El dibujante, humorista y escritor grancanario Miguel Noguera, durante su espectáculo 'Ultrashow'. LA PROVINCIA / DLP

En las arenas movedizas del humor, la provocación y el experimentalismo, Miguel Noguera (Las Palmas de Gran Canaria, 1979) dibuja, escribe, interpreta y hace reír. Su espectáculo Ultrashow mezcla y agita estas facetas hasta su plena ebullición y, sin embargo, diez años después de su estreno en las tablas, Noguera aún reniega de los epígrafes de dibujante, escritor, actor y humorista. Noguera se define sencillamente como un espectador de nuestro tiempo, que se cuela entre los pliegues de la realidad, filtra lo que ve por el tamiz de su particular imaginario y lo transcribe en palabras y dibujos.

Y diez años después del debut de Ultrashow, una versión rupturista del monólogo convencional que le valió la etiqueta de "el Ferrán Adriá de la risa" por parte del crítico catalán Jordi Costa, Noguera continúa despertando asombro y desconcierto, admiración e incomodidad, aplausos y estupor. En definitiva, la sensación de que lo absurdo y lo brillante pueden abrazarse sobre el escenario. "Mi espectáculo es algo sencillo: explico una serie de imágenes y ocurrencias, una tras otra, donde me valgo de algunos dibujos proyectados, acompañados con una introducción fija de imágenes, una parte de canto y mucho margen para la improvisación", explica Noguera.

El pasado 2014, el narrador, que reniega de etiquetas, desembarcó con los Ultrashow en su isla natal por vez primera y, este fin de semana, regresa a la Sala Insular de Teatro (SIT) con una antología de ideas bruñidas con la lucidez y distancia que brinda el tiempo. Al fin y al cabo, "si fuese un humor totalmente personal, no sería humor".

"Hace 10 años que hago los Ultrashows y cinco años desde que los hago semanalmente", indica, "aunque la estructura es siempre la misma, el contenido se va renovando cada cinco o seis meses". En palabras del artista, "los primeros Ultrashow eran todos sin red... O más bien con una red infinita por cuyos agujeros cabía una persona". Ahora, las ideas que nutren los Ultrashow encierran la solidez de una trayectoria atravesada por la vida. El resultado es un despliegue de "humor relativamente negro, metalingüístico y muy autorreferencial, que se ríe de sí mismo". ¿Pero qué asuntos o temáticas constituyen el motor de su propuesta? En esencia, son ideas forjadas con el material que extrae "de anotaciones y dibujos que realizo a diario y que se corresponden con momentos concretos que he visto o vivido en la calle", indica el artista. Sin embargo, los seguidores de Noguera podrán identificar en el despliegue las viejas obsesiones que recorren la obra del narrador, tanto en la literatura como en los escenarios. "Podría decirse que utilizo el mismo material en shows, libros y dibujos; medios distintos, pero con el mismo material", afirma.

Precisamente, en el terreno literario acaba de publicar La vieja tigresa o el erotismo de la senectud (Blackie Books, 2015), donde vuelven a desfilar su proclividad a retratar la vejez y a reflejar cierta estética del ciberpunk. Por tanto, se trata de una nueva mirada sobre sus obsesiones habituales que, bajo un título esgrimido "entre la broma y la impostura", es, en realidad, "la prolongación de un mismo libro". "Podría decirse que mi obra es toda un mismo libro, partido en distintos fragmentos", explica. "No escribo libros en un sentido convencional, sino que acumulo fragmentos y ocurrencias y los voy escribiendo y dibujando y, cuando llega al número adecuado para publicarse como un libro, eso se maqueta y se publica, como fragmentos que se suman y forman un nuevo libro". "Sí, algo similar a la manera en que construyen los Ultrashow", añade.

Por último, una confesión. "Si tuviera que escoger, me gustaría dedicarme sólo a hacer libros y renunciar a lo demás, y no al revés", revela. "En los shows, el público responde más deprisa, pero la literatura tiene algo de reposado, es más reflexiva, más clara".

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