El punk y rock en Canarias nunca habría sido lo mismo sin el concurso de Pistol. Como personaje y profesional. El batería de incofundible pegada que responde al nombre de Víctor Arrocha Mendoza, recibe un homenaje en formato audiovisual con el estreno del documental Pistol. Un trabajo con guión y dirección del periodista y músico José María de Páiz, producido por el sello discográfico y editorial tinerfeña Los 80 Pasan Factura, que se estrena mañana viernes en Espacio Cultural Aguere, en La Laguna, Tenerife, a las 20.00 horas.
Con un metraje de 27 minutos y fotografía en blanco y negro, se trata de un homenaje que incide más en la persona que en el músico, aunque es difícil disociar lo uno de lo otro en el caso de Pistol. Batería de Familia Real, proyecto que tuvo dos años de agitada vida y con quienes facturó el histórico y cotizado single Destruye/Depresión (Aries, 1982); de Ataúd Vacante, fijo en la alineación desde su debut discográfico en 1988 con Nichiquitaunamosca (Discos Medicinales, 1987) y los siguentes álbumes Chorros de amor (Ja Ja Records, 1988) y En facturation (Ja Ja Records, 1990); miembro de la primera formación de Brutalizzed Kids, en la que se enroló por invitación del guitarrista Fafe Gamero con quien compartió vida en Ataúd Vacante, y ahí queda el estreno con BK, Hoy de noche sale el sol (2004); y el hombre de las baquetas en 13 Motos, el proyecto para el que lo reclutó otro compañero de viaje, Silver S. Ramos, el frontman de Familia Real y Ataúd Vacante.
Desde los primeros 80 no ha dejado de tocar, aunque la música haya sido el camino a la redención en algunos pasajes más revirados de la historia de este personaje nacido en La Gomera un 7 de marzo de 1964, y que a los siete años trasladó su residencia a Tenerife. "Es un emigrante entre islas para el que la música fue un elemento redentor", explica José María de Páiz, autor a su vez del libro Héroes del Rock Canario (2013, Los 80 Pasan Factura), donde Pistol ya aparecía retratado junto a Silver, Fafe, y un puñado de grandes nombres de la música en Canarias, como Carlos Dalton, José María Suárez, Juanjo Jorganes, Sergio Baucells Txetxo, Jorge Cortizas El Cuervo, Miguel Díaz Zurda, Carlos Catana, Antonio Rodríguez, Juanma Rodríguez, Miguel y Ginés Cedrés, Ane Fernández, Sergio de Páiz Potage, Juanje Luzardo, Mame Spínola y Nico Hernández.
Pero volvamos a Pistol y la película. El proyecto tiene su arranque en el libro anterior, si bien De Paíz ya había realizado algunas producciones audiovisuales con anterioridad a esta, quedaba pendiente del compromiso de abundar de forma tangencial en la huella de la que es su banda de cabecera: Ataúd Vacante. "Uno siempre se fija en los frontman de los grupos, y Pistol es por méritos propios el tercer hombre. En el primer encuentro que tuve con él [en las entrevistas para el libro], me quedé descolocado, y quise buscar un tema vinculado al audiovisual tras cinco años sin trabajer en el medio", detalla José María de Páiz.
"Me gustan los personajes y contar historias, y con Pistol tenía la necesidad de expresar cosas, porque es una especie de animal herido, y de alguna manera me gané su confianza. Pistol es un superviviente de una época, de una forma de vida, y en esta producción la música queda en un segundo plano porque me interesaba profundizar en su vida, la infancia, los años en La Gomera, la llegada a Tenerife, y sobre todo qué efecto tuvo la música en la vida de Pistol", detalla el guionista y director de este trabajo.
La música, por extraño que parezca, queda en un segundo plano en favor de la palabra y del verbo de Pistol. El documental tiene una banda sonora compuesta por el lanzaroteño Alejandro Aguilar, y sólo suena un tema de Ataúd Vacante, un guiño del autor al feroz cuarteto tinerfeño con Subiremos al cielo, canción y título que la banda grabó en 1995 en los estudios Multitrack, masterizado y editado por Los 80 Pasan Factura en 2104 en el 30º aniversario del grupo.
