El Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria abre el próximo sábado, 14 de noviembre, a las 20.00 horas, el programa cultural que con vocación de permanencia se pondrá en marcha en Palacete Rodríguez Quegles. El futuro, título con el que el certamen grancanario inicia la programación de ciclos temáticos en el emblemático edificio, rastrea entre rarezas y joyas de la ciencia ficción.

Sobre el primero de los ciclos, El futuro, el director del Festival, Luis Miranda, comentó que tal como corresponde al género, "estas películas imaginan futuros utópicos, o más bien distópicos, indeseables, desde la ironía."

La selección de títulos incluye tres grandes clásicos y tres películas actuales pero independientes, al respecto Miranda ha detallado que estos trabajos, que podrán verse los sábados a las 20.00 horas, en el patio del edificio, del 14 de noviembre al 19 de diciembre, destacan por su excepcionalidad.

Planeta prohibido, uno de los básicos de la ciencia ficción de serie B de los 50, será la que abra el ciclo. El cierre recaerá en una obra maestra de Godard, Lemmy contra Alphaville, película que cumple ahora medio siglo de existencia y que tal como ha señalado el director del Festival, "es una reflexión sobre la existencia llena de poesía y libertad, y, posiblemente, la primera película que ha considerado la ciencia-ficción como una máquina de reciclaje de iconos y temas de la cultura pop, mucho antes de Blade Runner".

Entre los títulos que se integran en El Futuro también se encuentra una de las películas más extravagantes que se hayan hecho nunca, Zardoz, de John Boorman, "una mezcla de psicodelia, fantasía heroica y distopía hippie", según Miranda.

El responsable de programación del Festival grancanario, además, ha defendido los atractivos del resto de títulos que completan el programa, "películas que han sido realizadas con poco dinero, muchas ideas y con un gusto exquisito".

Sobre Electroma (2005), un experimento minimalista realizado por el dúo de música electrónica Daft Punk, ha destacado la soberbia selección de temas musicales; de Beyond the Black Door (2010), película canadiense que recrea la ciencia-ficción de los 70 y 80, ha subrayado una potencia visual infrecuente; y en cuanto a la casi artesanal Primer, Luis Miranda ha señalado que su director, el físico de formación Shane Carruth, está considerado como uno de los nuevos talentos del cine fantástico actual.