La densidad matérica de la obra de Manolo Millares encarnará en sonidos mañana sobre el estrado del Auditorio Alfredo Kraus con la interpretación que la Gran Canaria Wind Orchestra hará de Achahucanac, composición de Yónatan Sánchez inspirada en el artista isleño y que desvelará, en estreno absoluto, esta joven formación. Además, la partitura se verá enriquecida con la proyección de distintas imágenes con obras de Millares, configurando así una atractiva experiencia multimedia en torno al quehacer del pintor y grabador.

Achahucanac es una de las cuatro piezas que integran el programa que ofrecerá la Gran Canaria Wind Orchestra en la que es su cuarta presentación pública. Bajo el epígrafe Personalidades y retratos, el concierto de la formación, que estará dirigida por Francisco Ferreira, incorpora también obras de Martínez Gallego y los estadounidenses Alfred Reed y James Barnes.

La obra de Martínez Gallego es Los Caprichos de Goya, dedicada al artista aragonés, que refuerza así el carácter pictórico de la velada. Si a esto añadimos que hoy la Filarmónica grancanaria interpreta Cuadros de una exposición de Mussorgski, orquestada por Ravel, obtenemos un completo lienzo de músicas inspiradas en las artes plásticas.

Ferreira elogió el formato de la Wind Orchestra, una banda sinfónica que acoge instrumentos de viento, percusión y cuerda grave, idónea para viabilizar cierto repertorio contemporáneo. "Es algo que todos los responsables políticos deberían tener en consideración. La mayor parte de compositores de finales del siglo pasado y lo que va de éste están escribiendo mucho más para viento y percusión", explicó el director, quien advirtió de que "la modernidad del siglo XXI nos puede llevar a que la Wind Orchestra acabe siendo la principal formación". Además, elogió a Alfred Reed, como uno de los compositores que mejor han sabido definir el tipo de composiciones que privilegian el formato de banda sinfónica

Esteban Ponce, impulsor y director artístico de la orquesta, puso en valor un proyecto "diferente, que da una oportunidad a jóvenes talentos que se están formando para ser profesionales en el mundo de la música". Explicó que "cuando los alumnos terminan los ciclos del Conservatorio, se encuentran con que hay un vacío, pues no hay trabajo para todos. La Gran Canaria Wind Orchestra pretende abordar este frente desatendido".

El concierto de mañana supone, en palabras de Ponce, "una oportunidad para escuchar otro tipo de música, que no se suele hacer en Gran Canaria por la dificultad del repertorio y del montaje. No hay una formación así".

Lamentó las condiciones económicas en las que se tiene que desenvolver la Wind Orchestra. "No contamos con medios. Tenemos el respaldo del Auditorio Alfredo Kraus, pero hemos comenzado sin dinero, con sólo 2.000 euros de presupuesto para cuatro conciertos".

Por su parte, el director general de Cultura del Cabildo grancanario, Oswaldo Guerra, destacó que la orquesta de viento es "una forma de apoyar a la gente que se dedica a la música, a estudiantes y profesionales que se visibilizan gracias a este proyecto". Además, manifestó la voluntad de su institución de colaborar en próximas ediciones con un proyecto que ha venido siguiendo de cerca desde su aparición.