Los conciertos de música popular siguen cotizando a la baja en Canarias. Según los datos aportados ayer por la SGAE, estas presentaciones acumularon en 2014 un total de 357.438 espectadores y recaudaron 3.776.071 euros, si se incluyen macrofestivales y grandes conciertos, lo que supone un descenso de 8,1% en el primer guarismo con respecto a 2013, pero un repunte del 1,1% en la recaudación. La presidenta de la sociedad en Canarias, Cristina del Río, atribuyó esta contradicción al "ligero incremento en el precio de las entradas", especialmente verificable en los conciertos de grupos extranjeros.

"Se ralentiza la caída, pero aún no hemos recuperado los números de 2008", explicó Del Río, para quien "la música ha sido más castigada en Canarias que en otros lugares de España", ya que por las singularidades territoriales del Archipiélago "el mercado está acotado al propio mercado insular".

Otras actividades artísticas muestran mejores números durante 2014, según el anuario de la SGAE. En artes escénicas aumentó, respecto al año anterior el número de representaciones (52,7%), el número de asistentes (43,6%) y la recaudación (47,5%).

En el ámbito de la música clásica, la caída es más amortiguada que en el ámbito de lo popular en el número de conciertos, que caen un 3,8% en el número de conciertos (203 en 2014), un 6% en el número de espectadores (con 136.099 asistentes totales), pero caen en la recaudación el 11,6% (1.125.644 euros)

La presidenta de la SGAE Canarias se congratuló del circuito que pondrá en marcha el Cabildo grancanario, pero pidió que "se haga con músicos profesionales, porque hemos tenido un exceso de amateurismo".

También se refirió a la crisis que atraviesa la comercialización de la música grabada y la migración a formatos como el streaming, que a día de hoy ofrecen una dudosa rentabilidad para el creador. "Por cada 3.000 descargas en menos de tres meses se reciben seis céntimos", explicó. A este respecto, el timplista Germán López explicó que "estamos en esas plataformas por existir", no porque muestren una rentabilidad. En cuanto al soporte físico, las tiradas, que solían ser de entre 2.000 y 4.000 discos, se han visto reducidas a entre 500 y un millar.