El cineasta estadounidense George Lucas criticó hace unos días en una entrevista el estilo "retro" de La guerra de las galaxias: el despertar de la fuerza y bromeó con que había vendido los derechos de la saga a "esclavistas blancos". Sin embargo, ayer emitió un comunicado en el que puntualiza sus ataques.

"Quisieron hacer una película retro. Eso no me gusta. En cada película, trabajé muy duro para hacerlas diferentes", aseguró primero Lucas en una conversación con el periodista Charlie Rose recogida en The Hollywood Reporter. "Las hice completamente diferentes: planetas diferentes, naves espaciales diferentes, para convertirlas en nuevas", añadió el creador de La Guerra de las Galaxias y vendió la franquicia galáctica a Disney en 2012 por 4.000 millones de dólares.

Ahora asegura que hubo "una mala interpretación" de sus palabras, y que usó una "analogía inapropiada", por lo que se disculpa. "He trabajado con Disney durante 40 años y los escogí como custodios de Star Wars por mí respeto a la compañía y al liderazgo de Bob Iger", para acabar el comunicado con un "me siento orgulloso de J. J. Abrams, director responsable del nuevo título.