El presidente cubano, Raúl Castro, y la mítica bailarina Alicia Alonso asistieron el viernes a la reapertura del Gran Teatro de La Habana, renombrado en honor a esta legendaria artista, en una función que festejó los 95 años de la prima ballerina assoluta y el 57 aniversario de la Revolución cubana.

Castro, que acudió acompañado del primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel, y otras altas figuras de su Gobierno, saludó familiarmente a Alonso, a quien tomó de la mano y ayudó a ocupar el asiento de su derecha, ante el aplauso del público reunido en la sala, totalmente renovada y con capacidad para 1.300 personas.

En el discurso inaugural, el ministro de Cultura cubano, Julián González, reconoció la trayectoria de la exbailarina y coreógrafa, a quien llamó "una de las mujeres más importantes de la historia de Cuba", porque "tras triunfar en EEUU" regresó a la isla y ayudó a fundar la escuela cubana de ballet, hoy referente mundial.

"Pocas veces confluyen tantas importantes razones para convocar a un auditorio", dijo González, en referencia a los 95 años de Alonso y al "cumpleaños de la revolución cubana", que triunfó el 1 de enero de 1959 liderada por Fidel Castro, por lo que en la isla comunista se celebra esta efeméride junto a la llegada del Año Nuevo.

El Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso estrenó nuevo nombre en septiembre pasado, por un acuerdo del Consejo de Estado cubano que decidió rendir tributo "de manera excepcional" a la trayectoria de la exbailarina, fundadora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), del cual es aún directora general.

En Cuba no es habitual bautizar instituciones o edificaciones con nombres de personalidades vivas.

El edificio, antiguo Centro Gallego de Cuba y una de las joyas de La Habana Vieja, recibió durante tres años una restauración "que merece un libro de memorias", según advirtió González, en la que se renovó la fachada, se amplió el vestíbulo y se añadieron nuevos espacios como un café y una pequeña sala de espectáculos. En la sala Federico García Lorca, sede de presentación habitual del BNC, se instalaron nuevas lunetas y un moderno sistema de sonido y luces.