El director Thomas Hengelbrock aseguró ayer que "la pasión" de los músicos es el elemento "principal" dentro de una orquesta. El maestro alemán hizo estas declaraciones durante la presentación del concierto que, dentro del 32º Festival de Música de Canarias, ofrecerá este viernes en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria y el sábado en el Adán Martín de Santa Cruz de Tenerife. Hengelbrock, que dirigirá a la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, ofrecerá un programa integrado por la Obertura opus 12 de Karol Szymanowsky, el Concierto para oboe y pequeña orquesta en Re Mayor de Richard Strauss, con Lucas Macías Navarro como solista, y la Sinfonía 8 en Sol Mayor de Antonin Dvorak.

"El resultado último de la puesta en escena de una composición, por emblemática que sea, depende siempre de la persona que la toca, que puede hacer con su actitud que una pieza suene mejor o peor", señaló el director alemán. Hengelbrock, que acudió a la presentación acompañado por la directora del Festival, Candelaria Rodríguez; el gerente de la Orquesta, Juan Mendoza y la directora general de Cultura del Gobierno de Canarias, Aurora Moreno, puso como ejemplo una ocasión en la que dirigió la sinfonía Heroica de Beethoven en La Habana. "Se trataba de una sinfonía que ya había dirigido veinte veces antes", señaló, "pero esa fue la ocasión en que sonó más bonita, por la pasión que pusieron los músicos". Y añadióque en alguna ocasión ha participado en espectáculos de ópera en Viena " que ha sido aburridísimo", subrayó, a pesar de que esa ciudad está considerada "la capital" de ese arte.

Hengelbrock destacó que el programa está compuesto por obras de autores "de tres edades diferentes y con proyecciones vitales diferentes", ya que la de Szymanowsky es una obra de juventud, la de Strauss se hizo cuando este era ya un octogenario y Dvorak creó la suya en su madurez, lo cual no impedirá, dijo, "que el resultado de su conjunción sea satisfactorio".

El director destacó que el concierto será del agrado del público por el trabajo de los miembros de la Filarmónica de Gran Canaria, con los que ya había llevado a cabo "un primer ensayo muy prometedor" y aclaró que sea cual sea el clima que haya, como nieve, lluvia o viento, "todo se tiene que sumar a la intensidad de la música".

Por su parte, Juan Mendoza aseguró que traer un maestro de la talla de Hengelbrock es un estímulo. "Una orquesta se enriquece con las visiones de distintos directores y esto es positivo para el festival de Canarias". La directora del certamen Candelaria Rodríguez calificó a Hengelbrock como "uno de los directores más solicitados de nuestro tiempo". Y explicó que el certamen de este año cuenta con "una programación que ha sido alabada por Juan Diego Flórez" al paso por las islas del tenor, si bien admitió que hay quienes han criticado su oferta. "Es algo que respeto", aclaró, "porque si las críticas son constructivas, bienvenidas sean".

Candelaria Rodríguez defendió, además, el criterio que se ha seguido al elaborar la programación, que ha consistido en confeccionar una oferta "para el mayor número posible" de espectadores, ya que, "no se puede programar para cuatro personas" que sean las más versadas en música clásica de las islas. A ese respecto, destacó que el público haya respondido agotando las entradas para los conciertos de los Niños Cantores de Viena, pese a que "hubo quien dijo que no era algo adecuado para el festival".

Aurora Moreno destacóque el Festival quiera potenciar su presencia fuera de las Islas capitalinas con los conciertos en Fuerteventura y Lanzarote, recordando que la Filarmónica grancanaria orquesta estará el 23 denero en los Jameos del Agua con Pedro Halffter.