La presidenta de la Academia de Hollywood, Cheryl Boone Isaacs, reaccionó ayer a la falta de diversidad mostrada por las nominaciones a los Óscar en sus últimas dos ediciones y prometió "grandes cambios" después de que artistas negros amenazaran con boicotear la ceremonia.

"Me gustaría reconocer el magnífico trabajo de los nominados de este año", indicó Isaacs en un comunicado enviado a los medios. "Al mismo tiempo que celebramos sus extraordinarios logros, me siento afligida y frustrada por la falta de inclusión. Es un tema de conversación difícil pero importante, y es hora de grandes cambios", añadió.

La Academia no escogió a ningún actor negro por segundo año consecutivo en las nominaciones de los Óscar, una situación que en 2015 provocó la creación de la etiqueta #OscarsSoWhite (Óscars tan blancos) en las redes sociales y que, tras el anuncio de las candidaturas el pasado jueves, se recrudeció con la etiqueta #OscarsStillSoWhite (Óscars todavía tan blancos).

Isaacs (una mujer negra) afirmó que la Academia va a tomar "medidas drásticas para modificar la composición de nuestra membresía" y prometió que en las invitaciones que el grupo extienda en los próximos años habrá "una diversidad muy necesitada".

El 93 por ciento de los académicos son blancos, el 76 por ciento son hombres y la edad media es de 63 años.

El cineasta Spike Lee, Oscar de honor este año, fue uno de los que se declararon en pie de guerra contra la Academia y anunció que no acudirá a la ceremonia.