San Sebastián ha inaugurado oficialmente su estatus de Capital Cultural Europea 2016 con una ceremonia que ha constituido un alegato en favor de tender puentes entre diferentes como base de la convivencia dentro de Europa, un continente que se construye desde los valores de respeto y apertura.

Las palabras "puente" y "convivencia" han sido las más repetidas por las personalidades que han subido al escenario del Teatro Victoria Eugenia, donde se ha celebrado el acto institucional por el que la ciudad se ha convertido en Capital Cultural de Europa, una distinción que comparte con Breslavia (Polonia), cuyo alcalde ha viajado a San Sebastián pero no ha podido acudir por encontrarse enfermo.

El director general de San Sebastián 2016, Pablo Berastegui, ha augurado que será un año "extraordinario, intenso y sorprendente" que bajo el lema "Cultura para convivir" reivindicará que "la cultura tiene un lugar destacado en la construcción de la sociedad sea en el ámbito, local, europeo o global".

Poco después, la directora general de Educación y Cultura Europea, Martine Reicheres, ha sido la encargada de entregar al alcalde, Eneko Goia, la placa y el diploma que acreditan a la ciudad como capital cultural ante un público en el que se encontraba una amplia representación del Gobierno Vasco con el lehendakari, Iñigo Urkullu, a la cabeza, además del ministro de Educación y Cultura, Iñigo Méndez de Vigo, el delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, y el presidente de la Diputación de Guipúzcoa, Markel Olano, entre otros.

En el pario de butacas se ha sentado también el exalcalde de San Sebastián, Odón Elorza, impulsor de la idea de convertir a la ciudad en capital cultural, aunque no ha intervenido en un acto que se ha desarrollado en tono sobrio con actuaciones de música y danza.

Goia ha agradecido el trabajo de las personas que "pusieron las piedras" para construir el sueño de la capitalidad, "a pesar de las dificultades del camino", y que se ha hecho realidad.

El primer edil donostiarra ha remarcado que el País Vasco "sabe mucho de sufrimiento y de destrozar puentes", por lo que ha abogado por "quemar rastrojos y elegir el camino de la convivencia", "cruzar puentes y hacer puentes, los nuestros y los colectivos", para "comprendernos, para disfrutar y para vivir juntos".

En el mismo sentido han girado las palabras de Urkullu, quien ha reiterado que "si se mira atrás" en Euskadi se ve que la violencia "rompe las relaciones y destruye puentes".

Por ello "son necesarios los puentes entre diferentes", ha indicado el lehendakari, quien ha subrayado que "no necesitamos llenar Europa de muros" sino crear un espacio abierto.

San Sebastián 2016 constituye una "oportunidad de fortalecer nuestra propia identidad abierta al mundo, este es el momento de reafirmar la cultura como eje fundamental del futuro de Euskadi, de la construcción de una sociedad crítica y madura con personas abiertas y con valores sólidos", ha agregado.

La capitalidad cultural ratifica el deseo del País Vasco de "participar del carácter universal que otorga la cultura" en una Europa "que se construye desde los valores del respeto diversidad y apertura", ha concluido.

Méndez de Vigo ha comenzado su discurso con un recuerdo Gregorio Ordóñez, asesinado por ETA hace hoy 21 años, y ha asegurado que los valores de libertad, tolerancia y entendimiento que defendió el edil del PP son también los que sustentan la capitalidad.

Tras felicitar al equipo por el "acierto en la elección de los contenidos", Méndez de Vigo ha incidido en que la cultura supone el "cimiento más sólido" de Europa y sin ella "la realidad política" actual "no hubiera podido desarrollarse".

"Toda esta esencia europea se va a manifestar en San Sebastián", ha señalado el ministro, quien ha defendido que se debe aspirar a que de "todas las ideas que surjan con este intercambio cultural algunas puedan concretarse en proyectos útiles" para el desarrollo económico y social de la ciudad.

Olano ha insistido en que la capitalidad es una oportunidad para relanzar el patrimonio cultural de San Sebastián y de Guipúzcoa y para aprender a dialogar con otras culturas.