Los Niños Cantores de Viena toman el relevo en los escenarios del 32º Festival de Música de Canarias, con una gira de cuatro conciertos que llevará al coro infantil desde hoy viernes y hasta el lunes 8 de febrero a las dos auditorios capitalinos (viernes 5 en el Auditorio Adán Martín, y domingo 7 en el Alfredo Kraus), y a las catedrales de La Laguna y Santa Ana (sábado 6 en Tenerife y lunes 8 en la capital grancanaria), con un programa que recorre la historia de la música, y otro eminentemente sacro.

En los conciertos previstos en los dos auditorios, se ha optado por un repertorio que incluye obras de Mozart, Purcell, Joseph Haydn, Schubert, Schumann, Johann Strauss, Vivaldi, Haydn y Bizet, entre otros, las populares Nel blu dipinto di blu (Volare), O sole mio, Over the rainbow de El mago de Oz, y We are the world, de Michael Jackson y Lionel Ritchie; mientras que en las catedrales se interpretará un repertorio religioso con una veintena de obras de Vivaldi, Tomás Luis de Victoria, Mozart, Bartholdy, Rossini y Saint-Saëns.

Ayer, en Santa Cruz de Tenerife y en un encuentro con los medios de comunicación, los integrantes del coro y su director Manolo Cagnin abundaron en la filosofía de la agrupación y lo que supone formar parte de esta familia de los Niños Cantores. Así, Lorenzo Márquez, miembro austriaco-colombiano del coro, asegura que cuando canta está "en el cielo" aunque a veces se pone "nervioso". Por su parte, el maestro director, Manolo Cagnin, subraya que el objetivo de esta formación es "motivar a todos los niños del mundo" a amar la música. Ambos expresaron su alegría por visitar Canarias en el marco del 32º Festival de Música de Canarias.

El maestro director de los Niños Cantores de Viena, Manolo Cagnin, señaló que su presencia en el festival es una ocasión no solamente musical sino pedagógica, pues "cuando cantamos con las mejores orquestas" y en teatros de todo el mundo su afán es sensibilizar a todos los niños del mundo a que también pueden actuar, si cuentan con una buena voz.

"No es fácil" dirigir un coro con niños de entre 10 y 14 años aunque "hago mi trabajo con mucho gusto porque estoy al cien por cien con ellos", afirmó Cagnin, quien dijo que no se trata de ser "severo" en su labor sino de actuar casi como un padre, un amigo, porque convive con niños "en un momento muy difícil", de preadolescencia.

Tres horas de ensayo

Por ello su trabajo no es meramente musical sino también contestar a preguntas "sobre la vida", pues es un contacto humano antes que musical, dijo Cagnin, quien detalló que ensayan durante tres horas diarias "y es necesario que sea divertido" aunque, matizó, "son niños que quieren cantar". Al respecto Lorenzo Márquez, nacido en Salzburgo de padre austriaco y madre colombiana, dijo que del programa que interpretarán en esta visita a Canarias, su pieza preferida es el Gloria, de Vivaldi.

Pero también cantarán fragmentos menos festivos, como una partitura cumbre de la polifonía renacentista, el Officium Hebdomadae Santae que dedicó el español Tomás Luis de Victoria a la Semana Santa. A este respecto, Manolo Cagnin indicó que es importante explicarles a los niños "la trama" de lo que van a cantar, en este caso, sobre la crucifixión, pero siempre "en un idioma que puedan entender". Este es el lado más difícil de su trabajo, apuntó el director del coro, pues hay diferentes personalidades en el coro y al final el propósito es "que canten veintiséis voces diversas con un único objetivo".

La directora del Festival de Música de Canarias, Candelaria Rodríguez, aseguró que los Niños Cantores de Viena traerán "el deleite" al evento y subrayó que trabaja en la idea de "expandir" el festival, que no se quede "para un grupo reducido" sino que sea "de todos" y para ello este coro es el proyecto ideal. Por su parte, Aurelio González, viceconsejero de Cultura del Gobierno canario, calificó de "enorme acontecimiento" la presencia en las islas del coro.

Los Niños Cantores de Viena han cantado en la Capilla Imperial de la capital austriaca desde 1296 y compositores como Joseph y Michael Haydn y Franz Schubert fueron integrantes del coro, según la información facilitada por el Festival de Música de Canarias.

En la actualidad está integrado por cien niños divididos en cuatro coros que ofrecen unos 300 conciertos al año y, junto con la Wiener Philharmoniker y el Wiener Staatsoper Chor interpretan la misa del domingo en la Capilla Imperial, como han hecho desde 1498.