Vuelve el tango. Así de claro y contundente se lo reveló una gitana a Jorge Alorsa, líder de la Guarida Hereje y profeta del género, en el año 2000 al leerlo en los pozos del café. Y no se equivocó. Desde entonces el nuevo tango vive un periodo de esplendor: Gotan Project, Tanghetta, Bajo Fondo, 34 puñaladas. Y entre estos se posiciona con fuerza la propuesta de Altertango, exponente de esta nueva camada del tango en el siglo XXI y su combinación de música de cámara, jazz y, sobre todo, rock. Hoy actúan, a partir de las 20.30 horas, en el Centro Cultural Cicca.

"El tango contiene la esencia del ser argentino", explicó la pianista Elbi Olalla. La receta del éxito parte de las distintas corrientes migratorias que confluyeron en Buenos Aires en los primeros años del siglo XX: un poco de español, otro tanto de italiano, una pizca de la vieja Europa, algo de los criollos, del gaucho, de la milonga campera y la nostalgia de lo que se perdió y no vuelve más. También está ese deje psicoanalítico y freudiano. "Todo esto está en el tango y cuando lo cantás o lo bailás, empezás a conectar con una cosa que no sabías que tenías dentro pero que está agarrada fuertemente", apuntó.

Algunos expertos sostienen que el tango es muy rockero y esto facilita la fusión entre estilos. Para Ezequiel Acosta, que toca el bandoneón, es al revés. "Nuestros ídolos, Spinetta, Charly García, Fito Páez, son músicos que escucharon mucho tango cuando eran niños. Incluso algunos tuvieron padres que fueron cantantes de tango y eso marcó su música", argumentó este. Por eso, la combinación de estilos es natural. Para este grupo, con 15 años de historia, cinco discos y un viaje infinito por Sudamérica y Europa, la mezcla no fue premeditada sino que surgió a partir de un ejercicio de libertad creativa basada en sus propias influencias. "Crecimos escuchando rock, jazz, tango y otras músicas y sencillamente dejamos que floreciera", sostienen. Esta banda mendocina presenta su último trabajo, Farguest. Su libertad creativa sobre el escenario está lejos de los puristas y se combina con el baile de dos parejas. Porque "los carceleros de la humanidad no me atraparán". Palabra de Charly García.