Cada persona tiene su dibujo. Así se lo transmitió el pintor Pedro González a su discípulo Fernando Álamo, quien intuyó entonces que el arte es el lenguaje universal que derriba las barreras. Con estas pinceladas trazaría el proyecto Sin límites para la creatividad, dirigido a personas con discapacidad, con el propósito de impulsar su potencial artístico a través de la fotografía y la pintura. "El mundo de la discapacidad es un mundo habitualmente oculto, que no tiene voz y casi nunca, por no decir nunca, es visible", manifiesta Álamo, alma máter de esta iniciativa promovida por el Departamento de Educación y Acción Cultural (DEAC) del CAAM, con la colaboración de la Obra Social La Caixa. "Lo que pretendemos con estos talleres es que estas voces sean realidad".
El pintor tinerfeño, Premio Canarias de Bellas Artes 2014, preside por quinto año consecutivo los talleres de pintura entre Gran Canaria y Tenerife, que arrancaron esta semana con integrantes de la Orden Hospitalaria San Juan de Dios, en Gran Canaria, y de Acaman, en Tenerife. En paralelo, los fotógrafos Lorena Morín y Rafael Arocha inauguraron ayer el taller de fotografía en San Martín Centro de Cultura Contemporánea con alumnos de Aspercan (Asociación Asperger Canarias), que se desarrollará en cuatro sesiones que gravitarán alrededor de "la fotografía como herramienta de expresión".
"¿Para qué sirve una fotografía?", preguntan ambos al inicio del taller. Los alumnos, que comparten en voz alta sus aspiraciones de futuro y se declaran, en su mayoría, amantes del manga, alzan la mano con entusiasmo. "Queremos hacer hincapié en la idea de la fotografía como una herramienta de comunicación para expresar una emoción, una idea, para contar una historia", apunta Arocha, para quien "la fotografía es una pregunta continua". "Y nuestro objetivo es que ellos saquen conclusiones todo el tiempo", añade. Le secunda Morín: "Queremos que cada uno se aproxime a la fotografía de una manera en que no lo ha hecho nunca, y que experimente y que pruebe, porque la fotografía también se aprende de manera orgánica y viva". "Sentimos que es un reto absoluto y, probablemente, ellos nos enseñarán más cosas a nosotros que nosotros a ellos". Ambos fotógrafos se embarcan por primera vez en esta aventura, que culminará con el ejercicio de crear una historia propia en forma de fanzine.
Una vez concluidos los talleres, se celebrarán dos exposiciones benéficas en ambas islas con las distintas obras de pintura y fotografía, que en Gran Canaria tendrá lugar del 5 al 8 de mayo en el CAAM y cuya recaudación se destinará íntegramente a las tres asociaciones. "Al final, el objetivo último de estos talleres es realizar un trabajo final digno, y que no desmerezca en absoluto su exhibición, con total libertad y certeza, en un espacio como el CAAM, como una apuesta más dentro de la trayectoria normal del museo", concluye Álamo.
