La industria de la música grabada ingresó en España 161,5 millones de euros en 2015, una cifra que supera en diez puntos porcentuales la de 2014 (146,8 millones), según el informe de la Federación Internacional de la Industria Discográfica (IFPI), que sitúa a Adele y Alejandro Sanz a la cabeza de ventas.

Estos son los datos que se desprenden de este documento hecho público ayer en Londres, un texto que señala que la industria discográfica internacional "parece repuntar lentamente" tras el "desplome" de los formatos físicos y las "dentelladas" de las descargas ilegales durante "una larga década".

Y así sucedió en España, según el informe, donde las "mejorías" de 2014 y 2015 son las primeras después de un "descalabro ininterrumpido" desde 2001.